“Cuando el deporte deja de ser deporte”. Con ese titular, los responsables de la Federación de Castilla y León de Piragüismo denunciaban este miércoles mediante sus canales oficiales en distintas redes sociales un presunto sabotaje a su furgoneta. Una furgoneta estacionada en la calle Obispo Acuña en Zamora.
En concreto, desde la Territorial explicaban que se habían encontrado la rueda rajada, por lo que no podían hacer uso del vehículo. “Lo curioso de todo, es que era el único vehículo de toda la calle a la que le habían causado el daño”, apuntan los responsables del ente autonómico.
Por último, lanzaban un mensaje velado hacia los supuestos culpables: “Parece que alguno le molesta el trabajo de la Federación y nos intentan dificultar en el día a día. Es una pena que el deporte llegue a estos extremos”, zanjan en esa reflexión pública.