El Balonmano Zamora Enamora recibía al Amenábar Zarautz con la intención de sacarse la espina de la sonrojante goleada que le endosó el conjunto vasco en la jornada inaugural del campeonato (43-26). Desde entonces el combinado pistacho solo ha conseguido una victoria, frente a Ikasa Boadillas. A pesar de todo, el cambio de entrenador ha traído consigo un aparente cambio en la dinámica del equipo que, pesé a que volvió a caer por 30-34 en el debut del nuevo técnico, la sensación del equipo era diferente.
Por ello, de nuevo en casa, los pistachos llegaban al encuentro buscando por fin una victoria que hiciera crecer al equipo y que volviera a sumar. Y es que siguiendo esa premisa, el Balonmano Zamora Enamora comenzó el partido mejor que su rival, aunque no conseguía despegarse en un marcador que seguía muy igualado. Conforme avanzaban los minutos el equipo pistacho comenzaba a acusar problemas de solvencia defensiva, siendo esta la fase en la que más fallos cometían y en la que menos contundentes se mostraban. Esos fallos defensivos permitieron al combinado visitante incluso adelantarse en el marcador.
Finalmente, tal sería la igualdad durante la primera mitad del encuentro, que el marcador al descanso sería de 15 para ambos conjuntos. Tras el descanso, la segunda mitad comenzaría de un modo parecido a como lo hiciera la primera, con un Balonmano Zamora Enamora más enchufado que su rival.
Además, el ambiente en el pabellón iba en aumento con cada acción ganada por los pistachos. En la pista lo sabían y alentaban a su afición para que siguiera haciendo del Ángel Nieto una caldera.
Afición y equipo confiaban cada vez más en la victoria de los viriatos, que habían conseguido poner el cerrojo a la defensa hasta sacar una ventaja de tres tantos en el ecuador de la segunda mitad con un marcador de 23-20. Uno de los grandes artífices del despertar pistacho en la segunda mitad fue David Mach, guardameta y que sostuvo al equipo con sus paradas después de una primera parte en la que no estuvo tan acertado.
Los viriatos finalmente, con su arrojo y el empuje de la afición lograron imponerse por 28-25 y los dos puntos se quedaron en el Ángel Nieto.
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