Era un encuentro clave para seguir poniendo tierra de por medio con la zona baja y el River Zamora era consciente de ello. Es por eso que desde el primer instante los zamoranos mostraron el ritmo y la intensidad necesaria para crecer desde la defensa, gran baza de la escuadra de Pablo Rivas esta campaña. El técnico había pedido durante la semana recuperar ese buen tono en el trabajo en retaguardia y el equipo le respondió con un duelo en el que apenas ofreció ocasiones al rival.
El Espinar, que llegaba a Zamora en la penúltima posición con apenas una victoria en su casillero, golpeó primero. Fue Diego el que hizo el 0-1 a los trece minutos. Pese a que el River Zamora se mostraba sólido en defensa y llevaba el peso del encuentro en ataque, fue la escuadra visitante la que se adelantó. Previamente, el River Zamora ya se había chocado con los palos.
No obstante, antes del descanso, Oli minimizó daños para su equipo poniendo el empate a un tanto antes del receso. Las sensaciones estaban siendo buenas en el equipo blanquinegro, pero el resultado no terminaba de acompañar al dominio que durante más fases tuvo la escuadra local.
El paso por vestuarios ayudó al River Zamora. Los locales siguieron mostrando su buen tono defensivo y con dos zarpazos se ponían 3-1. Los tantos de Oli y Velasco ponían a los de Rivas por delante en el marcador. No obstante, El Espinar acortó distancias acto seguido con el 3-2. Faltaban diez minutos y los zamoranos tendrían que sufrir si querían sacar tres puntos de oro para acercarse un poco más hacia el objetivo.
En esos últimos diez minutos, El Espinar apostó por portero jugador, pero la buena defensa del River Zamora FS se multiplicó en ese tramo decisivo y entre los jugadores de cancha y el arquero, los blanquinegros lograron mantener ese 3-2 que permite sumar tres puntos que colocan a los zamoranos en la zona media baja de la tabla, aunque con tres equipos por detrás, muy lejos de los 10 puntos que atesora la escuadra de Pablo Rivas.
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