Primer partido del Zamora B ante su afición tras la abultada derrota por 6-0 la jornada anterior frente a la Ponferradina B, y no pudo ser con victoria. El equipo rojiblanco cedía los tres puntos frente a un rival que demostró veteranía en los momentos clave del encuentro.
Partido áspero y sin ritmo en los primeros compases en los que ninguno de los dos equipos se hacía con el dominio del juego. Fue la Cistérniga quien gozó de las mejores ocasiones hasta que en el minuto 28, el árbitro señalaba penalti a favor de los visitantes y Colino se encargaba de colocar el 0-1 en el marcador.
Los pupilos de Coria no se vinieron abajo e intentaron conseguir el empate antes del descanso, aunque sin mucho éxito. Tras el tiempo de asueto, los zamoranos salieron con más intensidad que su rival y eso se notó en el juego. Así, dispusieron de varias ocasiones para empatar el encuentro, incluyendo un penalti mediada la segunda mitad, que Anto erraba.
Fue tras este penalti errado cuando los vallisoletanos jugaron mejor con el tiempo y con su superioridad física, lo que les permitió anotar el 0-2 tras robar el balón en medio campo y ejecutar perfectamente la contra. Ya en el tiempo de añadido, los visitantes apuntillaban a un Zamora desfondado física y mentalmente anotando el tercer y definitivo gol.
Aún así, tras la derrota cosechada, el entrenador zamorano, Calvo Coria, aseguraba que ha habido una ligera mejoría con respecto al último partido y que toca seguir trabajando en la misma línea para conseguir el objetivo.