Pese al enfado por el empate de la última jornada en casa frente al Burgos Promesas en un partido en el que los de Yago Iglesias se pusieron con una ventaja de dos goles, la derrota del Avilés benefició a un Zamora que rompía el empate con los asturianos y se instauraba en playoff de ascenso a Primera RFEF, objetivo del club rojiblanco.
No obstante, las sensaciones tras el empate en casa frente al colista no fueron las mejores y los zamoranos afrontan la salida a tierras gallegas con la esperanza de volver a la senda de la victoria y hacer bueno el punto cosechado la semana pasada.
Un partido en el que habrá un condicionante, el césped. Y es que en la ciudad gallega se alternan cada fin de semana dos equipos para jugar como local lo que hace que el verde no esté en las mejores condiciones para recibir a un conjunto que busca de una vez por todas hacer 95 minutos redondos.
En frente, un rival que ha ido de más a menos en la competición y que estaba en la parte alta de la tabla cuando asaltó el Ruta de la Plata en la jornada 7. Ahora, con dos derrotas consecutivas ocupa la duodécima posición de la tabla con dos puntos de margen sobre la posición de promoción de descenso.
Yago Iglesias, no podrá contar aún con el capitán, Dani Hernández, ni con los lesionados Galas e Iricibar.
El partido, a partir de las 17.00 horas, en O Couto.
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