El Zamora CF llegaba a tierras gallegas aún con la resaca de la Copa del Rey coleando en el seno de la entidad rojiblanca. A pesar de ello, los de David Movilla mantendrían los pies en el suelo y, conscientes de lo importantes que son tres puntos en una competición como la Segunda Federación, plantearían un partido cerrado y procurando dejar el mínimo espacio posible desde la defensa.
Rojiblancos, hoy de negro, y gallegos tuvieron que hacer frente desde el inicio de la contienda con las lluvias, el viento y el mal estado del césped, que hacía que el ritmo del encuentro fuera más lento y el juego, más trabado. Tanto es así, que durante la primera parte el marcador no llegaría a moverse y apenas hubo acercamientos por parte de cualquiera de los dos equipos. Así, los 22 jugadores sobre la moqueta de A Magdalena se iban camino de los vestuarios sin haber podido descorchar el electrónico en tierras gallegas.
Tras el entreacto, el Zamora CF comenzó a sentirse más cómodo con el balón, especialmente tras la entrada de Carlos Ramos para sumar más control en la medular zamorana. No obstante, ambos equipos continuaban sin inquietar demasiado la portería contraria. A los 53 minutos, un saque de esquina propició una clara ocasión para el Racing Villalbés, aunque los locales no lograron remachar para perforar la portería defendida por Troya.
Los minutos pasaban y ninguno de los dos equipos conseguía inquietar a su rival, ni encontrarle las cosquillas para poder hacerle daño. El encuentro se encaminaba hacia su final y el Zamora CF no quería dar por bueno el empate. Finalmente, el marcador ya no se movería, a pesar de que el Zamora CF gozó de otra ocasión clara tras un balón colgado por Carlos Ramos, aunque el conjunto zamorano no logró perforar la portería local. El conjunto dirigido por David Movilla, pues, suma un punto más y dormirá una semana más como sólido líder de la Segunda Federación.
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