En el caso del Zamora, los rojiblancos han caído en este inicio liguero en el Ruta de la Plata ante cuatro de los seis primeros clasificados del Grupo I de la Segunda División B. Guijuelo, UD Logroñés, Celta B y Murcia se llevaron por la mínima los cuatro partidos disputados en el Ruta de la Plata y dejaron sin puntuar al equipo de Roberto Aguirre. Se trata de unos datos que hacen que este arranque liguero sea uno de los peores arranques históricos del club ejerciendo como local. De hecho, ha habido temporadas en las que el Zamora, a final del curso, no ha pasado de esas cuatro derrotas como local.
Además, son unos números totalmente opuestos a los logrados la temporada pasada cuando los rojiblancos se hicieron fuertes en las posiciones de privilegio de la tabla durante los primeros meses de competición gracias a su rendimiento en su feudo. Este año, desde el inicio de pretemporada, el equipo no ha terminado de conectar con la grada ni de encontrar sensaciones positivas jugando en el Ruta de la Plata.
Tampoco han acompañado los rivales a batir, ya que el Zamora se ha medido en las cinco primeras jornadas ligueras en su feudo a cuatro equipos que a día de hoy están entre los seis primeros de la tabla y perdió ante los cuatro. Los rojiblancos tan solo han podido ganar al Lealtad en Zamora, único rival que ha visitado el Ruta de la Plata este año que peleará, teóricamente, por la permanencia, al igual que el Zamora.
Parece evidente que con la permanencia como objetivo clave y básico de los rojiblancos su rendimiento en el Ruta de la Plata tiene que empezar a mejorar. Eso sí, ahora los zamoranos tendrán dos encuentros a domicilio ante Astorga y Coruxo, regresando dentro de tres semanas a la capital del Duero para verse las caras ante otro rival directo: el Tropezón.
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