Víctor de Aldama, presidente ejecutivo del Zamora, dejaba muy claro este pasado domingo en la propia rueda de prensa pos partido tras la eliminación ante el Alcobendas que el proyecto seguirá. De hecho, confirmaba como técnico a David Movilla y mostraba su intención de sentarse cuanto antes con el entrenador vasco y con César Villafañe para planificar la próxima temporada.
A nivel de plantilla, las incógnitas son elevadas. Hay que apuntar que un importante número de jugadores tenían por contrato la renovación automática en caso de ascenso a la Segunda División B. Eso sí, al no darse esa circunstancia, apenas son tres los futbolistas que poseen contrato: Iago, Raúl Álvarez y David López. A partir de ahí, será la dirección deportiva, cuerpo técnico y presidencia ejecutiva la que valoren el rendimiento de cada futbolista y sopesen su continuidad.
Parece lógico que jugadores como Jon Villanueva o Asiel, entre otros, puedan tener ofertas de superior categoría, tras la buena temporada realizada. De hecho, en el caso de Asiel, ya se le vincula con equipos de Salamanca de Segunda División B. Además, habrá otros futbolistas que tras su paso por Zamora tomen la decisión por iniciativa propia de no continuar en el club. Mientras que otros no han ofrecido el rendimiento esperado y tampoco entrarán en los planes del primer equipo. Será desde ese punto de partida desde el que arrancarán De Aldama, Villafañe y Movilla a la hora de perfilar el nuevo proyecto.
Un nuevo proyecto en el que tendrán que pulirse los errores cometidos este curso recién finalizado y en el que David Movilla tendrá la posibilidad de tener voz, y supuestamente voto, en la confección de una plantilla que en su primera etapa en el Zamora ya se encontró confeccionada casi al cien por cien.