Analizar la mala situación que atraviesan los dependientes de nuestro país fue el objetivo que perseguía la ponencia que el Movimiento en Defensa de la Sanidad Pública organizaba este pasado martes. Ana Esteban (presidenta estatal de Solidaridad Intergeneracional) y Emiliano Tapia (experto en desarrollo rural) fueron los encargados de arrojar los datos más importantes de la dependencia, tanto a nivel local, como autonómico, como nacional.
Los ponentes pusieron evidentes reparos al sobresaliente que hace uno días le otorgaba el Observatorio Estatal para la Dependencia a Castilla y León. Ambos conferenciantes sí admitieron que puede ser una de las comunidades que más rápido ejecuta la ayuda para la ley y donde más porcentaje de beneficiarios existen, pero recordaron que los dependientes castellano y leoneses son los que más copagan y los que reciben menos prestaciones, por el descenso de la calificación. “Son parámetros que están intencionadamente manipulados para que dé una buena nota cuando la realidad es que la aplicación o no aplicación de esta ley está haciendo daño a muchas personas”, coincidían.
La presencia de ciudadanos fue importante, ya que se trata de una Ley que afecta de manera directa o indirectamente a muchas personas. Ante la presencia de este buen “quorum”, el debate posterior a la charla fue mucho más enriquecedor a la hora de aportar preguntas o lanzar cuestiones para intentar buscar respuestas por parte de dos expertos en la materia.
Hay que recordar que Carlos Pedrero y Paco Estravis explicaban hace uno días que los datos provinciales hablan de que en la capital zamorana son 1.500 las personas que se benefician de esta ley, mientras que en el resto de la provincia son alrededor de 4.800 los beneficiarios. Eso sí, el 43 por ciento de los solicitantes han visto como la administración no aprobaba su prestación.
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