El consejero de la Presidencia, Ángel Ibáñez, estuvo este martes en Zamora, donde fue cuestionado por los criterios de desescalada establecidos por la propia Junta de Castilla y León y que presentó Francisco Igea en la tarde del lunes.
“Tenemos que tratar de dar pasos firmes, no podemos tirar por la borda todo lo que hemos conseguido en los últimos meses de esfuerzo”, aseguró antes de lanzar un agradecimiento a los ciudadanos por su compromiso en “el cumplimiento de las medidas”.
Asimismo, el consejero de la Presidencia recalcó que el compromiso de la Junta es “seguir avanzando en el mejor ritmo posible con la vacunación” para tratar de vencer al coronavirus “lo antes posible”.
Frente al levantamiento del cierre perimetral de la Comunidad de Madrid para las fechas de Semana Santa, Ibáñez se mostró tajante y aseveró que “la posición de la Junta de Castilla y León es que deberíamos haber aprendido de lo que ocurrió en Navidad y se debería de optar por unos criterios nacionales homogéneos”. Una petición que choca con las pasadas “17 navidades distintas” que el Gobierno de España permitió hace unos meses, tal como destacó Ibáñez, y que ocasionaron “una movilidad excepcional que ha contribuido al repunte de esta última ola”.
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