La nueva presidenta de la Asociación de Trabajadores Autónomos de Castilla y León (ATA CyL), Leticia Mingueza, se marcó hoy como retos mejorar la digitalización de los pequeños negocios, fomentar el espíritu emprendedor entre los jóvenes para frenar la pérdida de trabajadores por cuenta propia e incrementar el colectivo en el medio rural para revertir la despoblación y el envejecimiento.
La hasta ahora secretaria general de la organización profesional, que asume el cargo en sustitución de Domiciano Curiel, tras presentar su candidatura a la Alcaldía de Palencia por Vamos Palencia, destacó que negociará con las instituciones y las administraciones para que establezcan ayudas a los autónomos para compensar el incrementos de los gastos con la situación económica actual. En este sentido, se mostró esperanzada en que se mantenga la relación fluida que existía entre su predecesor y la Junta. “Estoy convencida que continuará en la misma línea con la Dirección General de Economía Social y Autónomos”, añadió.
Mingueza reconoció a la Agencia Ical que asume la Presidencia de ATA Castilla y León con “mucho” compromiso y responsabilidad, además de mostrarse convencida que estará a la altura de las circunstancias, después de que toda su vida profesional ha estado relacionada con el mundo de la empresa al desempeñar tareas de asesoría jurídica. Esta aboga vallisoletana asumía la Secretaría General de ATA desde septiembre de 2019 aunque estaba vinculada a la asociación desde hace siete años. Además, consideró que puede aportar “mucho” a ATA por lo que su intención es poder presentarse a la reelección de su cargo en los comicios que tendrán lugar en 2024.
La nueva presidenta autonómica de ATA reconoció que el momento es complejo ya que los autónomos encadenan problemas por la situación económica generada desde la pandemia del COVID. “Es un colectivo que sufre una constante inestabilidad e incertidumbre”, explicó. Leticia Mingueza enumeró entre esas dificultades la inflación, el aumento de costes, el encarecimiento de los productos financieros y las materias primas y la caída del consumo de los hogares. Todo ello, señaló, ha influido que la Comunidad haya perdido casi 2.500 autónomos el año pasado, hasta los más de 190.000 trabajadores, una cifra que está lejos de los casi 200.000 que existían antes de la crisis de 2008.
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