No es un secreto que la vivienda se ha utilizado como un activo para la especulación desde antes de la burbuja inmobiliaria. En este sentido el mercado del alquiler se ha consolidado como una de las opciones que mayor rentabilidad aporta al propietario y, por ello, se ha convertido en una de las primeras opciones de inversión.
Según informa Alquiler Protegido, empresa especializada en el sector, los alquileres destinados a inversión han crecido un 40% en el último año. Los principales motivos obedecen a que la firma de hipotecas de viviendas de bajo coste se ha disparado por la facilidad para su concesión y la intención de los propietarios para utilizarlas con fines especulativos.
Y es que existen pisos antiguos entre 60 y 75 metros cuadrados con tres habitaciones en ciudades medianas y pequeñas que se pueden adquirir a partir de 35.000 euros hasta los 45.000 en zonas estratégicas cercanas a universidades, por ejemplo. Con unos gastos mínimos en reformas, que cada vez se conceden más a empresas inmobiliarias con servicios 360 que incluyen gabinete jurídico, se alquilan a jóvenes estudiantes de septiembre a julio por un precio que duplica el pago mensual de la hipoteca. Una rentabilidad que no se encuentra en ningún fondo de inversión de renta fija o variable.
Pero existen otros colectivos a los que el propietario de la vivienda puede alquilar para obtener similares rendimientos en lugar de fijar un precio por habitación. Alquiler Protegido indica que en las grandes ciudades ahora es más fácil obtener hipotecas de hasta 100.000 euros en pisos de similares dimensiones a los descritos anteriormente. El objetivo es el mismo; el precio del alquiler en ciudades grandes dentro del núcleo urbano es más caro y se le puede obtener un mejor rendimiento.
En estos últimos el perfil del inquilino objetivo cambia, acercándose más a personas divorciadas con necesidades de pisos más pequeños para una persona sin hijos o bien a parejas jóvenes que desean tener una primera vivienda.
El perfil del jubilado también adquiere un especial interés por parte de los propietarios en este tipo de alquiler ya que disponen de unos ingresos garantizados e indefinidos y necesitan espacios más pequeños y accesibles como pareja o de manera individual. Muchos de estos últimos venden sus propiedades con el fin de quitarse sus préstamos hipotecarios y vivir una jubilación tranquila en una casa de alquiler.
Finalmente, Alquiler Protegido hace especial hincapié en los cambios dentro del mercado de alquiler ya que los propietarios buscan la garantía de que todos los problemas que se deriven de los contratos de arrendamiento queden resueltos con la menor de las preocupaciones. Por ello se buscan empresas que garanticen el alquiler, su pago, defiendan al propietario de sus derechos frente al inquilino y puedan tener la tranquilidad que sus merecen por el hecho de ser propietarios.
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