“El actual vertedero de residuos sólidos está llegando al límite máximo de su capacidad, como se pone de manifiesto por los frecuentes incendios por saturación en el vaso, en los meses de verano. Algunos barrios de Zamora como Pinilla, Carrascal, San Frontis, Olivares o San Isidro reciben los malos olores que desprende el vertedero dada su proximidad a la ciudad y, posiblemente, también por la referida saturación”, exponía José Lui Gómez, concejal no adscrito del Ayuntamiento de Zamora, que también hablaba en nombre de la formación de Ciudadanos.
El objetivo de la moción es que el Consistorio solicite al Consorcio provincial de residuos la búsqueda de una nueva ubicación del vertedero de residuos sólidos urbanos. “Parece aconsejable, en este momento, actualizar y retomar esta propuesta teniendo en cuenta la prolija y lenta tramitación administrativa, que incluye licencias ambientales, que supondría este cambio”.
Todos los grupos municipales votaron a favor de esta propuesta, y tan solo el PP se opuso. El encargado de argumentar esa negativa fue Aurelio Tomás, también integrante del Consorcio provincial. “No es un vertedero como se ha dicho alguna vez, es un centro de tratamiento de residuos urbanos. En su día no se construyó a la ligera, sino que un grupo de técnicos estudió que ese era el mejor lugar. Además se hizo una inversión muy grande y esa inversión hay que amortizarla, porque construir ahora un nuevo centro de esas características supondría 25 millones de euros”. Además, añadía: “Es falso que haya muchos incendios. En catorce años solo se han producido dos incendios”.
Pese a aprobarlo, Francisco Guarido dejó clara la posición de su formación: “El Ayuntamiento también es parte integrante de ese consorcio. Plantearse un cambio a largo plazo es posible, pero tiene que ser a largo plazo para poder amortizar lo que hay. Apoyaremos todas las opciones, pero siempre con sentido común”, finalizaba.
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