El Ayuntamiento de Zamora presenta unos presupuestos "sin bombazos" para 2026

El alcalde Francisco Guarido y el concejal de Hacienda, Diego Bernardo, presentaron el proyecto de presupuestos del Ayuntamiento de Zamora para 2026, que asciende a 79,5 millones de euros, prácticamente igual al del año en curso. Desde el Gobierno municipal subrayan que se trata de una foto parcial de la inversión en la ciudad, ya que el presupuesto incorpora también partidas de obras iniciadas en 2025 que se trasladarán a 2026 mediante modificaciones presupuestarias a partir del 1 de enero.

Según explicó Guarido, partidas como las correspondientes al Mercado de Abastos o al parque de bomberos no aparecen reflejadas en su totalidad porque ya están en ejecución y se incorporarán formalmente al presupuesto del nuevo año. “El proyecto de presupuestos del 26 no es una foto fija económica de todo el año, sino una foto parcial de la inversión real que hay ahora mismo en la ciudad”, señaló.

El alcalde destacó que el Ayuntamiento vive “un momento económico positivo”, con un volumen de obras en ejecución cercano a los 14-15 millones de euros, sumando además proyectos impulsados por la Junta de Castilla y León y el Gobierno central, lo que eleva la inversión total a aproximadamente 100 millones de euros en el horizonte 2025-2026. Entre los proyectos municipales en marcha mencionó la rehabilitación del puente de hierro (unos 4 millones), proyectos de aceras por 4 millones y modernización del alumbrado (1 millón).

Guarido también puso en valor el servicio de ayuda a domicilio, cuyo contrato para 2026 asciende a 5,235 millones de euros, el más alto de la historia del Ayuntamiento, y que permitirá la creación de numerosos puestos de trabajo y la atención a más de 1.000 usuarios, con 240.000 horas de trabajo previstas, frente a las 75.000 de 2015.

En cuanto a los ingresos, el proyecto de presupuestos refleja un incremento en algunos tributos, aunque sin subir los impuestos municipales. Se prevé un aumento de 300.000 euros en IRPF, más de un millón en conjunto con plusvalía y el impuesto de actividades económicas, derivado de la mejora de la actividad económica y el crecimiento de población y empleo en la ciudad. La recaudación total por impuestos y tasas municipales alcanza los 43,3 millones de euros, mientras que el gasto en servicios directos supera los 48 millones, lo que evidencia que cada céntimo recaudado se reinvierte en servicios municipales.

El presupuesto también refleja la situación de las competencias impropias, como la ayuda a domicilio, cuya financiación debería ser 100% de la Junta de Castilla y León. Sin embargo, el Ayuntamiento aporta más de 3,3 millones, mientras que la Junta cubre 1,9 millones, asegurando que no haya listas de espera y garantizando la prestación del servicio.

En cuanto a gastos, el capítulo de personal representa más de 26,5 millones de euros, un tercio del presupuesto, y los gastos corrientes en bienes y servicios suman más del 53 % del total. Las inversiones reales ascienden a casi 5 millones, a los que se suman más de 15 millones en obras en marcha, como el ascensor de la Catedral, las aceras del Nazareno, el autocaravanes de Los Pelambres o equipamiento del parque de bomberos, lo que eleva la inversión municipal efectiva a más de 20 millones de euros a comienzos de 2026.

Por áreas, Urbanismo gestionará 12,3 millones, Seguridad Ciudadana 11,5 millones y Servicios Sociales más de 10 millones, mientras que el gasto en contratos se ha incrementado casi 3,4 millones solo respecto al año pasado, y más de 10 millones desde 2015, destacando el contrato de ayuda a domicilio con un incremento del 422% desde entonces.

Guarido subrayó que, aunque se trata de un presupuesto sin grandes novedades, permite consolidar inversiones y servicios, fomentando la actividad económica y mejorando la calidad de vida de los ciudadanos. Según sus cálculos, sumando inversiones del Ayuntamiento, la Junta y el Estado, Zamora vivirá en los próximos dos años un nivel de inversión sin precedentes, cercano a los 100 millones de euros.

El concejal Diego Bernado quiso reseñar que se trata de un presupuesto para los zamoranos, realista y comprometido con las necesidades de la ciudad, que busca mejorar la vida de los ciudadanos sin recurrir a grandes titulares ni “bombazos”, sino apostando por la continuidad y la gestión responsable de los recursos municipales.