Una boda de película... pero con final de vertedero que indigna a los vecinos de esta zona de Zamora

La celebración de una boda en la iglesia de San Ildefonso, en pleno corazón del casco histórico de Zamora, ha dejado este fin de semana una estampa poco festiva: montones de bolsas con botellines de agua abandonadas junto a un árbol, a escasos metros del templo, y otros tantos esparcidos por la calle Arcipreste y alrededores de la plaza.

Según relatan vecinos de la zona, aunque algunos botellines fueron recogidos y agrupados, otros quedaron esparcidos en plena vía pública, sin que nadie los trasladara a los contenedores más cercanos. "Lo lógico es que si se reparten botellines, también se garantice su recogida o se anime a los asistentes a depositarlos correctamente", critican.

El problema se agrava por la ubicación del vertido: el camión de recogida de basuras que circula por la cuesta cercana podría no ver las bolsas abandonadas, lo que haría que permanecieran allí todo el fin de semana, ofreciendo una imagen sucia y descuidada en un espacio que suele atraer a turistas y paseantes.

Además, vecinos han alertado de que algunos botellines ya han comenzado a volar con el viento hasta las inmediaciones del jardín, contribuyendo aún más a la sensación de abandono y desorden.

Desde el barrio piden más responsabilidad ciudadana y coordinación municipal para evitar estas escenas tras celebraciones privadas: "No cuesta nada usar un contenedor, lo contrario es actuar como unos cerdos", concluyen con evidente enfado.