En este mes de abril se cumplen 76 años desde la primera autorización de servicios con perros en la Guardia Civil y desde entonces la labor que realizan es muy distinta y en muchas situaciones indispensable. Desde Zamora24Horas hemos querido ahondar en el trabajo que se realiza con esta unidad en la Comandancia de Zamora, desde cómo se adiestran a los perros que están en activo en estos momentos como a algunas operaciones en la provincia en las que han sido indispensables.
Para ello, José Ramón Fradejas Rodrigo, el sargento primero Jefe del Grupo Cinológico de la Guardia Civil de la Zona de Castilla y León, ha realizado un análisis exhaustivo, desde el punto de vista más formal e incluso llegando al ámbito sentimental.
José Ramón hizo el curso de guía de perros en 2007 y hace siete años llegó a Zamora para convertirse en el jefe del grupo cinológico de la zona, que abarca toda Castilla y León. No obstante, desde que inició la especialidad, no ha parado de formarse puesto que requiere un permanente seguimiento y constancia en cuanto a las nuevas técnicas de adiestramiento a los perros y los nuevos conocimientos que se van adquiriendo.
Ahora, el jefe primero del grupo cinológico muestra en mayor profundidad la labor que realizan con algunos datos que sorprenderán a muchos:
Cómo ha evolucionado el Grupo Cinológico dentro del Cuerpo
Precisamente este mes se cumplen los 76 años de las primeras unidades que fueron autorizadas a usar perros policía. Al principio se usaban contra el bandolerismo y el objetivo era encontrar a los bandoleros que se ocultaban entre las piedras y materiales en el monte, ese fue el germen del uso de los perros policía.
Después la Guardia Civil se fue dando cuenta del potencial que tenían los perros para ayudar en otro tipo de tareas relacionadas con su poderoso olfato y fue cuando se empezó a usar el perro en otras circunstancias. Se dio cuenta de que, aparte de detectar personas, podían detectar cualquier tipo de sustancias y se fue abriendo el abanico hasta que para dar respuesta a cada necesidad nacía un perro que respondía a la misma.
Qué labores son más habituales a día de hoy
A nivel de Castilla y León, en la comandancia de Zamora el germen era la búsqueda de personas desaparecidas en grandes áreas, y posteriormente se empezaron a requerir otros servicios de perros detectores.
Por ello, contamos con un perro detector de cebos envenenados, que fue el primero a parte de los de búsqueda de personas desaparecidas, y luego posteriormente contamos con perros detectores de drogas y un perro detector de papel moneda para ayudar a las comandancias de Castilla y León que necesiten este tipo de apoyo y de servicios, porque de hecho somos una unidad de apoyo a todas las necesidades que requiera la Comunidad, aunque a mayores la Comandancia de Zamora dispone de un guía y detector de drogas que sí trabaja exclusivamente en la provincia de Zamora.
Cómo se prepara a los animales para cumplir con estas labores
Los perros de la Guardia Civil son previamente seleccionados por unas determinadas características que nos hacen ver cuando son cachorros que van a ser buenos para adiestrar. Cada perro tiene una personalidad distinta, nosotros necesitamos que tengan mucha adicción al juego, que tengan los instintos de caza y presa muy desarrollados, y siempre seleccionamos a esos cachorros, aparte de las revisiones veterinarias y que sean adecuados físicamente para el arduo trabajo que les espera.
A partir de ahí, hay un ciclo de obediencia para que el perro obedezca y siga las instrucciones del guía, para después enseñarle qué olor queremos que discrimine, ya que hay que recordar que el perro huele a nivel molecular y se estima que huele unas 50.000 veces mejor que el ser humano.
Una vez que sabemos que el perro es capaz de discriminar en ese nivel de olores, ya le enseñamos qué olor en particular queremos que discrimine y que encuentre y eso se hace a través del juego, una vez que encuentra ese olor obtiene lo que quiere, el juego y la satisfacción del guía, que él la percibe también.
A partir de ese momento, una vez que ya sabe qué olor queremos que busque o encuentre, le enseñamos de qué manera queremos que trabaje, ya que es distinto un perro que trabaje en el monte en grandes áreas que hay que enseñarlo a batir y a recorrer grandes extensiones de terreno, que un perro detector de droga, dinero o restos biológicos que son más minuciosos y le tienes que ir señalando prácticamente con la mano que zonas quieres que te resuelva.
Una vez pasado todo ello, tenemos que enseñarle al perro la forma en la que queremos que nos comunique ese foco de olor: rascando, ladrando, quedándose congelado señalando con la trufa el sitio por el que sale el olor… dependiendo de su función.
Por otro lado, hay una época entre las 4 y las 12 semanas de vida que es uy importante, el perro sufre improntas cerebrales y es lo que se le queda, se le queda marcado de por vida y es ahí cuando tienes que aprovechar para que se le quite el miedo a todo tipo de terreno y que no tengan miedo a nada y reciba todo tipo de experiencias.
Cómo distinguen los animales el momento de trabajo y el de ocio con el vínculo que tienen con el adiestrador
El vínculo entre el ser humano y los perros es algo atávico, genético, ancestral, el perro lleva dentro de su genética el acercamiento al ser humano. La diferencia de los perros de trabajo es que permanecemos con ellos prácticamente las 24 horas, porque a parte del adiestramiento físico y pasar gran parte utilizando su celebro en buscar, algo que a los perros les gusta muchísimo, también lo sacas particularmente al terminar de trabajar.
Para que distinga en qué momento vamos a trabajar y cual es de asueto, simplemente se usa un collar o un arnés, cuando el perro detecta uno u otro entiende lo que vamos a hacer, hay que utilizar siempre el mismo para trabajar y se enfocan en el trabajo y tratan de identificar el olor con mayor intensidad incluso que en el tiempo de asueto.
Alguna actuación o actuaciones en las que el grupo cinológico haya sido clave
Nosotros somos una herramienta más que tiene la Guardia Civil para determinados servicios, somos un equipo más junto al equipo Pegaso de los drones, junto a los equipos de Seguridad Ciudadana, con los compañeros del Seprona…. Nuestra tarea es aportar algo más para encontrar a una persona o detectar lo que sea necesario.
Si es cierto que los perros con ese poder olfativo que tienen nos ayudan en muchas ocasiones y a veces puedes pasar al lado de una persona inconsciente en el suelo a dos metros y no la ves porque esta entre unas jaras y unos matorrales, sin embargo, el perro no trabaja con la visión, trabaja con el olfato y va a responder a ese estimulo.
En los últimos dos años, por ejemplo, un perro detectó a una persona, un hombre mayor, que se había caído boca arriba en un regato y no se podía mover, el agua le cubría prácticamente medio cuerpo y estaba totalmente oculto porque se había salido del camino que recorría habitualmente. Recorrió mucha gente ese camino en su búsqueda y no dábamos con él, y el perro sí detecto a esa persona.
También en Zamora un hombre salió al monte en un intento de autolisis y lo había comunicado a su familia. Acudieron patrullas en gran número para intentar disuadirle y no lo encontrábamos porque se ocultaba de la acción de las patrullas, sin embargo, no te puedes ocultar de la acción del perro y fue el perro en cinco minutos el que lo encontró entre unas jaras.
Estos son algunos de los ejemplos por los que a lo largo del tiempo te vas dando cuenta de que si no hubiera sido por la acción del perro no habrías encontrado a alguna persona.
Pero además, la labor del perro a veces no es tanto para encontrar a una persona sino para saber en qué lugar no está, principalmente en zonas complicadas de monte. Limpiamos la zona y la misión más principal en las búsquedas es decirle el jefe que ahí no está la persona y que no te lo aseguro yo, te lo asegura mi perro que es en el que confío, ya que descartar lugares es muy importante también.
No obstante, hay en otras ocasiones que la labor del perro es primordial, muchas veces el helicóptero no puede volar, se empieza a hacer de noche, los drones con nieve, viento o niebla lo tienen mas complicado y el perro es todoterreno y es una de las herramientas que siempre están activas y trabajan en cualquier situación.
A nivel personal, alguna actuación que le haya marcado
Más que una actuación, a mí personalmente lo que más se me queda son las caras, aunque trato de evitar que no se me traspase porque el perro no solo te lee las ordenes directas, te lee las emociones y tú no puedes verter en él las emociones que estás sintiendo en este momento para que el perro se dedique y se concentre en la actuación que tiene que hacer.
Recuerdo en el límite entre Zamora y León una familia con dos hijos que fue a recolectar setas a un monte con la abuela, y cuando empezó a anochecer no encontraban a la abuela. Recuerdo la cara de ese hombre cuando llegamos, la cara de desesperación absoluta, de sentirse responsable de que se había perdido su madre, pero también de la cara de sentirse algo aliviado al llegar los agentes y no sentirse solo. Eso se te queda marcado, los humanos percibimos esas sensaciones que se ven reflejadas en la cara, pero al perro no le puedes decir que lo dé todo de sí mismo porque siempre lo da todo en todas las circunstancias, da el 150%.
Finalmente, la alegría cuando se consigue un resultado positivo, de entrega total y de reconocimiento a la labor que hacemos. Son muchas caras las que me vienen a la memoria y son difíciles de digerir.
Los perros se hacen mayores y llega el momento de jubilarlos ¿es un momento duro?
Es una situación muy complicada para el guía porque son perros con los que convives y forman parte de ti, te miran y te miran al alma, coges una gran conexión con ellos, ellos tienen una confianza en ti tremenda.
Hay perros, como los de grandes áreas, que llega un momento que entran en un declive físico que puede llegar sobre los 7 u 8 años y aunque siguen siendo válidos para realizar un trabajo de búsqueda, tenemos la obligación de mantener el máximo nivel posible.
Llegado ese momento, la Guardia Civil te ofrece dos posibilidades, uno es que te lo quedes de forma particular, se da de baja operativa y la Guardia Civil lo pone a tu nombre.
Lo que ocurre es que hay muchos guías que no tienen capacidad en su casa para tenerlos, o tiene ya muchos perros y no puede hacerse físicamente con ese perro y ahí viene el dilema en el que puedes cederlo a una familia que pueda darle las atenciones que necesita porque por mucho que te duela no puedes cuidar de él y hay dos organizaciones sin ánimo de lucro que se ocupan del proceso, puesto que se hace un estudio para encontrar a la familia adecuada.
Nadie quiere pensar en ese momento, y si puedes vas a intentar quedártelo, pero si no lo puedes atender es mejor que lo cedas y luego llamas a la familia para ver qué tal le va.
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