El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea, ha dado a conocer esta mañana, tras el Consejo de Gobierno, la intención de la administración regional de mantener el cierre perimetral no solamente hasta el próximo 23 de diciembre, sino hasta el próximo 10 de enero, una vez pasada la Navidad, en toda la Comunidad.
No obstante, a pesar del cierre perimetral, en la Comunidad se permite la movilidad los días 24 y 25 de diciembre, 31 de diciembre y 1 de enero, así como los días 5 y 6 de enero para mantener reuniones familiares en estas señaladas fechas.
Igea ha aclarado que a pesar de que se mantena el cierre perimetral en la Comunidad, el cierre perimetral entre provincias de momento no se llevará a cabo si la situación no empeora drásticamente en ninguna puesto que los establecimientos ya van a estar abiertos de forma similar aunque cambien cuestiones en las distintas provincias como los aforos.
De la misma forma, se mantiene el toque de queda a as 22:00 horas salvo los días 24 y 31 de diciembre y también el 5 de enero que se prolonga hasta las 01:30 horas de la madrugada, menos “para sus majestades los reyes y los pajes reales”.
Igea ha recordado que por el momento a partir de mañana se eliminan todas las restricciones adicionales en las distintas provincias referentes a la apertura de la hostelería, los centros deportivos y los centros comerciales, a excepción de Burgos, aunque todas ellas se mantienen en nivel de alerta 4, mientras que los buenos datos en Ávila hacen que el sábado baje de nivel de alerta a nivel 3, algo que también se experimentará en Salamanca el lunes si no hay cambios y sigue la buena dinámica.
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