En un ambiente de alegría la Cofradía de La Borriquita llevó a cabo una entrañable jornada de convivencia el pasado domingo, como parte de las festividades para conmemorar el 75 aniversario de su fundación.
Desde tempranas horas de la mañana, el lugar se llenó de color y emoción, mientras los miembros de la hermandad participaban en una serie de juegos populares tradicionales, que sirvieron para estrechar lazos y fortalecer el sentido de comunidad entre los presentes.
La actividad central de la jornada fue la gran paellada, donde los aromas de este plato típico llenaron el aire y abrieron el apetito de los hermanos que se dieron cita.
Como no podia ser de otro modo, también hubo lugar para una emotiva misa en la que los hermanos de La Borriquita se unieron en oración y gratitud por los 75 años de existencia de la hermandad.
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