La comunidad de Castilla y León es ya un fiel reflejo del avance de la segunda ola de coronavirus con cerca de cuarenta municipios confinados al que se suma Burgos desde esta pasada noche. Una situación que agrava la incidencia del virus en la comunidad, pero sin embargo Zamora, junto con Benavente, es una de las zonas "que menos preocupa a la Junta", tal y como afirmó el vicepresidente de la Junta, Francisco Igea, en su visita a la capital el pasado lunes.
Unas declaraciones que llaman a la tranquilidad de la población, pero el alto índice de contagios registrado en la provincia en los últimos días, eleva los indicadores que llevarían a un posible confinamiento y que, de seguir creciendo al mismo ritmo de los últimos tres días, la sombra del confinamiento sobrevolaría con más fuerza la capital.
Los tres criterios marcados por la Junta para considerar que existe transmisión comunitaria y que llevarían al confinamiento son: una incidencia superior a 500 casos por cada 100.000 habitantes, UCIS por encima del 35% y tasa de positividad superior al 10%.
En cuanto a la incidencia de casos, la capital suma cerca de 380 casos en la última semana por 100.000 habitantes (con tendencia creciente), con más del 8% de positividad de los test y una ocupación en UCI rozando los indicadores, ya que se encuentra al 35%.
Esto supone que la no preocupación de la Junta, se apoya en los últimos siete días, en los que los datos se rebajaron, pero solo desde el viernes la provincia acumula 373 casos, de los cuales más de un centenar se ha dado en la provincia. Lo que quiere decir que la sombra del confinamiento aún está lejos de la provincia si se consiguen contener esta semana.
Lo que supone que estos criterios, al menos el primero de ellos no sería equiparable a la ciudad de Zamora puesto que su población apenas supera los 61.000 habitantes, lo mismo que ocurre con Palencia, aunque esta sí ha superado la incidencia de casos y los parámetros que ha estimado la Junta para su confinamiento.
Sin embargo, los datos de la última semana en Zamora no muestran un incremento reseñable, ya que la pasada semana se contuvo mínimamente el número de casos, sin embargo, atendiendo a los datos de los últimos cuatro días, de mantenerse así la tendencia, la Junta comenzaría a preocuparse más por nuestro territorio.
¿Qué medidas se aplicarían en el caso de superar los indicadores? ¿Es un confinamiento?
La respuesta a la segunda pregunta no es difícil de contestar. No sería un confinamiento como el que se vivió durante la fase más dura del estado de alarma, cuando los ciudadanos sólo podían salir de sus casas para ir a la compra, tirar la basura o pasear al perro. De hecho, las medidas a aplicar son muy similares a las que vivimos durante la Fase 1 de la desescalada, puesto que principalmente afectan a la movilidad y la capacidad de reunión de las personas.
Así, la medida principal es que se restringirá la entrada y la salida a los municipios salvo para los desplazamientos justificados, ya sean por motivos de trabajo, sanitarios, legales o judiciales, de educación, para volver a la residencia habitual o por otras causas debidamente acreditadas.
Eso sí, dentro de los municipios sí existirá la libre movilidad, siempre y cuando se utilicen las medidas de protección, tanto individuales como colectivas (uso de mascarilla o distancia social).
¿Se pueden atravesar las ciudades para dirigirse a otras? Sí. Si por ejemplo estas medidas se aplicaran en Zamora, los vecinos de Benavente que quisieran ir al sur de la provincia podrían cruzar la capital zamorana, pero no quedarse.
En lo que a los comercios respecta, las tiendas, locales comerciales y servicios abiertos de cara al público tendrán un aforo máximo del 50% y tendrán que cerrar, como tarde, a las 22 horas “salvo excepciones”.
Por su parte, los bares, restaurantes, establecimientos de hostelería y restauración y locales de juegos y casas de apuestas podrán abrir hasta las 23 horas, si bien no podrán admitir clientes a partir de las 22 horas (con la excepción de aquellos que sirvan comida a domicilio). El aforo en los mismos será del 50% en el interior y el 60% en las terrazas, y el consumo en barra no estará permitido. Además, la ocupación máxima por mesa será de seis personas.
Y es que esa es otra de las medidas fundamentales que se acordó en el Consejo Interterritorial. Porque, de aplicarse la orden, las reuniones sólo podrán ser de seis personas, tanto en espacios públicos como privados (lo que incluye domicilios). Sólo habrá la excepción de personas que sean convivientes y las actividades laborales e institucionales o en el de actividades en que se establezcan límites o medidas específicas.
Asimismo, el aforo también se limita en los siguientes espacios:
- En instalaciones deportivas, el aforo máximo es del 50% en interior y del 60% en exterior
- En lugares de culto, el aforo máximo será de un tercio
- Los velatorios podrán ser de 10 personas en interiores y de 15 personas en exteriores, sean o no convivientes. Asimismo, la participación en la comitiva para el enterramiento o despedida para la cremación de la persona fallecida se restringirá a un máximo de quince personas
- La práctica deportiva en grupos se reducirá a un máximo de seis personas
-En academias, autoescuelas y centros privados de enseñanzas no regladas el aforo máximo será del cincuenta por ciento
- Respecto a las competiciones oficiales de ámbito estatal y carácter no profesional (como Segunda B o la Liga Femenina de Baloncesto) será de aplicación el Protocolo de actuación para la vuelta de competiciones oficiales de ámbito estatal y carácter no profesional en la temporada 2020/2021, elaborado por el Consejo Superior de Deportes en colaboración con las distintas federaciones (RFEF y FEB, respectivamente)
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