Desde el CSI·F explican los motivos por los que el sector de Correos saldrá a la calle y tomará estas medidas de presión: “lo hemos intentado todo, hasta agotar las vías de diálogo e interlocutores que pudieran dar alguna solución real a la negociación de nuestro Convenio/Acuerdo y a un futuro esperanzador de Correos, pero no hemos obtenido respuesta. Pasados cuatro meses sin que nadie nos dé una razón, se produce una tensión que nos induce a pensar que nos toman el pelo, y que algo tenemos que hacer. Pero en esta ocasión, lo que se haga debe de tener consecuencias, por eso proponemos iniciar las movilizaciones con un calendario largo –por no decir indefinido– y duro: no podemos permitir que después de toda la andadura sindical se nos quiera despachar con un “no se puede””, comentan.
Hay que recordar que no serán los primeros paros de este sector, ya que el pasado 27-N tuvo lugar la primera huelga general que se saldó con un rotundo éxito. Lo mismo que la manifestación por las calles de Madrid, que se convirtió –con unos 20.000 carteros– en un auténtico enjambre de carteros. Posteriormente, y con el fin de no interferir en la campaña navideña, Correos desconvocó la huelga anunciada para los días 22 y 23 de diciembre, para dar un margen de confianza a la Empresa,
“Después de que ese gesto en Navidad no tuviese correspondencia, CSI·F tiene la obligación de hacer frente a esta sinrazón, con las únicas armas que posee y que sabemos que les puede hacer mucho daño a estos políticos que nos ningunean continuamente. Por eso CSI·F, que entiende que los trabajadores no pueden asumir ni sus representantes firmar un Convenio/Acuerdo con pérdidas y sin dinero, se dirige al conjunto de compañeros de Correos para que seamos capaces de reanudar las Movilizaciones y Huelgas más unidos que nunca todos los trabajadores a través de una sólida mayoría sindical”, comentan los representantes de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios.
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