Los precios de la gasolina y del diésel en España se han vuelto a disparar después de que la OPEP decidiera recortar de manera drástica su producción de petróleo el pasado 5 de octubre.
De esta forma, los conductores que se acercan estos días a repostar sus vehículos están ya pagando 1,95 euros de media por cada litro de diésel, un 4,8% más que la semana pasada mientras que los que repostan gasolina tendrán que desembolsar 1,76 euros por cada litro.
Traducido al mundo cotidiano, llenar un depósito de tamaño medio (55 litros) cuesta en torno a los 107 euros en el caso del gasóleo y aproximadamente 97 euros en el caso de la gasolina. Con estos datos, llenar el tanque con diésel es ahora igual de caro que hace tres meses, mientras que la gasolina ha alcanzado un nuevo máximo en mes y medio.
Más significativa es aún la comparación con principios de año, cuando el gasóleo costaba un 44% menos y la gasolina un 19% menos.
Una situación dramática para muchos bolsillos que soportan la subida de combustibles, luz, gas y alimientos mientras los salarios apenas se han revalorizado un 2,6%.
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