La Audiencia Provincial de Zamora ha dictado sentencia por la que se condena al ex jefe de parques y jardines del Ayuntamiento, Alberto Vega, a un año de prisión y a seis meses de multa con cuota diaria de 20 euros por un delito de estafa procesal en grado de tentativa tras adjudicar a una empresaria gallega la instalación de elementos en el parque infantil de la plaza de Belén que en realidad fue realizado por Raga.
Tras el juicio que se celebró el pasado 18 de enero tras tres suspensiones y una última advertencia de la jueza ante la dilatación de la causa, este viernes se ha conocido la sentencia en la que también se condena a la empresaria gallega como cómplice a un mes de prisión y un mes de multa con una cuota diaria de 5 euros, tras reconocer en su declaración que “quien hacía y deshacía y quien se encargaba de todo" era Alberto Vega y que ella solicitó la factura de algo que nunca ejecutó a instancias del ex jefe de parques y jardines.
Por su parte, a la empresa gallega que intentó cobrar la factura, la sentencia insta a su disolución inmediata.
Se trata de la pena máxima establecida o inferior en un grado si el hecho hubiera sido consumado, y además no concurren ni agravantes ni atenuantes.
Este es el primer juicio de todo el proceso que tiene pendiente Alberto Vega debido a la contratación irregular de varios asuntos, concretamente de 15 contratos.
En este sentido, el alcalde de Zamora, Francisco Guarido, ha resaltado que “este es el inicio que hace justicia y que abre la puerta a todo lo que a venir después”, recordando que en dos años Vega llegó a trasladar a la imputada algo más de 40.000 euros en comisiones.
Así mismo, Guarido ha incidido en que “lo importante es atajar la corrupción”, agradeciendo a Romualdo Fernández su labor, así como al abogado del consistorio puesto que además, cuando sea el caso Raga, tendrá que enfrentarse a seis abogados con “gente poderosa que intentará dilatar el proceso”.
Respecto al abogado de Vega, Conde Pumpido, el alcalde ha señalado que es “inédito” que una sentencia dedique tantas hojas a recriminar la actitud del mismo, ya que se mostró “con actitud impropia”, “estrafalario” y obstruccionista”.
Por último, ha concluido señalando que “se inicia bien el proceso” y de momento la sentencia no es firme y se puede recurrir por lo que la situación de Alberto Vega se mantiene y está suspendido de empleo y sueldo.
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