"Aquí soy feliz y aquí quiero formarme": un médico zamorano que reivindica su ciudad como el lugar ideal para completar su formación

"Cada uno es cada uno y su circunstancia, pero yo soy de aquí, aquí soy feliz y aquí es donde quiero formarme". Así explica Josué Cordero su decisión de seleccionar la plaza de Residente de Medicina Interna en el Complejo Asistencial de Zamora para completar su formación como médico. Este zamorano ha desechado otras posibilidades de crecer profesionalmente en otros hospitales más grandes como podía ser Salamanca y hacerlo en su Zamora natal.

"Los hospitales pequeños o medianos son mucho más familiares", comenta Josué como otro de los motivos principales de una decisión "que tienes que tomar en muy pocos días y que te marca mucho". "El sistema de MIR en España es muy intransigente", apunta y añade que "si tú eliges, por ejemplo, una plaza en Barcelona y después no estás a gusto en el hospital o con la especialidad que has elegido, las únicas opciones son aguantar cinco años o renunciar a la plaza, dejar al hospital con un médico menos cinco años y tener que volver a presentarte al MIR".

El Complejo Asistencial de Zamora, según este profesional de la medicina, "te permite, especialmente en la Medicina Interna, es ver de todo, casos muy diferentes, si bien en sitios más centralizados ves casos más particulares, pero se puede suplir con las rotaciones externas", explica y añade que "sobre todo en hospitales como el de Zamora te facilitan mucho que salgas a rotar en servicios concretos de hospitales de primer nivel”. Y es que esa es la idea principal de Josué Cordero: seguir aprendiendo poco a poco en su Zamora natal, donde es feliz y donde quiere seguir arraigado cumpliendo con su profesión.

Lo que este médico zamorano también quiere reivindicar es que Zamora, en campos como la Psiquiatría, es un puntero nacional y eso "es poco conocido para muchos". Asimismo, apunta que "en Zamora te formas, y te formas bien". Josué Cordero sabe que es complicado y que muchas personas de todos los campos en general, y los médicos en particular, abandonan la ciudad en busca de oportunidades en "otros lugares con hospitales más grandes", una decisión que él considera "completamente respetable", aunque haya decidido seguir un camino diferente y no abandonar la ciudad que lo vio nacer.