Pasadas las 22.00 horas comenzaba el espectáculo flamenco de las Ferias y Fiestas de San Pedro contando con la presencia de cientos de personas que se habían acercado con sus particulares meriendas a disfrutar de esta noche tan flamenca.
El primero en romper el hielo fue el Zambo, cantaor en extinción, el último eslabón del cante primitivo capaz de poner patas arriba a todo el público.
Allí, con la presencia de la Catedral los espectadores no dejaron de aplaudir y entre canción y canción mostrar su gusto por el concierto con sus “olé”.
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