Una celebración necesaria, más aún si cabe después de los duros años que está tocando vivir en Zamora. Tras la incertidumbre de la pandemia y sus consecuencias, llegó un verano desastroso para la provincia con incendios que dejaron imágenes dramáticas y situaciones inimaginables.
Hoy es día de celebración y reconocimiento y la Guardia Civil ha querido festejar el Día del Pilar con todos los zamoranos, dejando a un lado el acto tradicional más familiar en la Comandancia para desarrollarlo al lado de los ciudadanos, en el centro de Zamora, en la Plaza de la Marina abierto a todos.
Así, la celebración del día de la patrona de la Guardia Civil ha contado con autoridades y ciudadanos en un acto presidido por el jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Zamora, Héctor David Pulido y el subdelegado del Gobierno en Zamora, Ángel Blanco.
Sonaba el himno de España cuando se procedió al tradicional izado de bandera que daría paso al discurso del jefe de la Comandancia y del subdelegado del Gobierno, para después proceder a la colocación de condecoraciones.
Poco después llegaba el momento más emotivo. El tradicional homenaje a los caídos en acto de servicio, con la colocación de una corona de laurel abanderada en homenaje a todos ellos.
No obstante, la celebración también ha estado marcada por el calor, que ha causao estragos y algún que otro susto en la Plaza de la Marina, puesto que una agente llegaba a desmayarse en mitad del acto.
Las salvas rompieron el silencio tras este sentido homenaje y comenzó el desfile por el centro de Zamora, para finalizar así el acto en el que la Guardia Civil honra a su patrona.
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