Rafael Sánchez Olea, director general de Cobadu, atendía este martes a los medios de comunicación para analizar la situación en la que se encuentra el incendio que se originó la noche del domingo y los pasos que está dando la cooperativa.
Olea agradeció el apoyo prestado por toda la sociedad, haciendo especial hincapié en la disposición total de los medios de extinción, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y el apoyo de los propios trabajadores que han colaborado desde el primer momento. “El mismo día del incendio, a los veinte minutos ya empezaron a llegar trabajadores, algunos estaban hasta de vacaciones, para ayudar en lo que hiciera falta”, agradecía Sánchez Olea.
El director general de Cobadu relataba lo que sintió la mañana siguiente cuando se acercó a la zona afectada por el fuego en la que siguen trabajando los profesionales: “Miraba todo y veía humo por todos los lados, ya de día, la maquinaria calcinada hecha chatarra y la sensación era la de estar viendo una película de la Segunda Guerra Mundial”, comentaba todavía estremecido por la situación aunque ‘agradecido’ porque no hubo que lamentar daños personales y tampoco sufrieron daños las zonas fabriles de la cooperativa.
Por último, desveló que entre las cientos de llamadas y mensajes recibidos de apoyo y de muestras de ayuda estuvo la llamada personal del ministro de Agricultura. “Ahora veremos que líneas de ayuda pueden darnos tras todo lo que ha pasado”, comentaba tras agradecer las visitas de los representantes institucionales de Junta, Subdelegación del Gobierno y Diputación Provincial.
“La imagen del lunes en Cobadu era como el amanecer de las películas de la II Guerra Mundial”
Así describía este martes el director general de la cooperativa el aspecto que presentaba la cooperativa la mañana siguiente de producirse el incendio.
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