La plantilla de las oficinas de la Seguridad Social se reforzará este año de manera “importante”, tras la resolución de las ofertas de empleo, que llevan “un poco de tiempo”, para paliar la caída “extraordinaria” de la última década del número de de funcionarios.
Así lo avanzó hoy el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, que intervino en Valladolid en un desayuno-coloquio organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) y el Ayuntamiento de la ciudad.
Con ello, señaló que algunos “cuellos de botella” en la atención en las oficinas se puedan abordar con más funcionarios, que recordó fueron los que durante los años más duros de la pandemia del COVID-19 fueron los que sostuvieron con su trabajo el estado de bienestar y el tejido productivo.
También recordó que en 2020 se introdujo el Ingreso Mínimo Vital (IMV) en mitad de la pandemia que llega a 20.000 familias de la Comunidad y se tramitaron los mecanismos de protección de los Expedientes Temporales de Regulación de Empleo (ERTE) y de los autónomos. Además, remarcó que han aumentado las pensiones gestionadas por el envejecimiento de la población.
El ministro de Inclusión señaló que en Valladolid y en Castilla y León se atiende en 15 días en el caso de la tramitación de las jubilaciones, por lo que señaló está garantizada la “continuidad de rentas”, algo que indicó no ocurre en el caso de las pensiones no contributivas que gestiona otra administración, en las que lamentó se producen retrasos son “considerables”.
No obstante, reconoció que a lo mejor no se está pudiendo satisfacer las demandas de información al ritmo deseado de quienes piden cita previa para recibir asistencia. Finalmente, destacó también el nivel de cargas por el problema de “improvisación de una década”, algo que insistió se está corriendo.
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