Investigadores de la Escuela Politécnica Superior de Zamora de la Universidad de Salamanca están desarrollando una alternativa a la unidad de generación eléctrica que utilizan los vehículos híbridos que ya están en el mercado. Los vehículos híbridos combinan motores de combustión y eléctricos y el objetivo de los investigadores es usar una turbomáquina térmica para mover el generador que alimentará las baterías del vehículo.
“La idea es sustituir los motores generadores que se usan actualmente, que son muy similares a los motores de los coches normales, por un sistema de turbinas que es mucho más ligero y que puede utilizar cualquier combustible”, destaca Juan Carlos Arenal, investigador del proyecto. “Estamos haciendo pruebas con biodiésel, con diésel, e incluso se podría usar gasolina o queroseno”, añade.
La unidad de generación eléctrica que propone este proyecto tendría un tamaño muy pequeño y se podría aplicar en cualquier tipo de vehículo que utilice motores eléctricos. Además, su consumo sería muy bajo, ya que se implementaría en lo que se conoce como un híbrido serie. “Los híbridos en paralelo tienen ventaja en consumos urbanos, pero si necesitas una mayor potencia, consumen más que un coche normal. En cambio, con un híbrido serie siempre estás al mismo régimen, consume lo mismo acelerando, decelerando, en entorno urbano o en autovía”, comenta.
Biodiésel de plantas no alimentarias
El hecho de que el sistema pueda utilizar diferentes tipos de combustible es clave dentro de las líneas de investigación del Departamento de Ingeniería Mecánica, que en anteriores proyectos ha desarrollado tecnologías de generación de biodiésel y ahora busca la manera de aprovechar este combustible, que contribuye a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. “Nos hemos dado cuenta de que muchas energías alternativas no se emplean porque no hay una tecnología asociada a la investigación que las ha hecho posible”, afirma Roberto José García Martín, director del proyecto.
Por eso, en colaboración con el equipo de Jorge Cuéllar, del área de Ingeniería Química, han trabajado en la obtención de biodiésel a partir de plantas que carecen de interés alimentario, como la jatrofa o las algas. Emplear este tipo de cultivos evita cualquier tipo de conflicto ético, porque no están destinados a la alimentación. El problema es que su rendimiento como combustible es inferior, así que los investigadores no sólo tratan de mejorarlo, sino de desarrollar tecnología que lo pueda aprovechar y dentro de ese propósito se enmarca también esta alternativa a los vehículos híbridos convencionales por medio de turbinas.
Este proyecto ha sido posible gracias a una convocatoria de la Fundación General de la Universidad de Salamanca para la realización de pruebas de concepto y al programa TCUE de la Junta de Castilla y León y permite a los científicos de la Escuela Politécnica Superior de Zamora seguir avanzando para lograr vehículos más eficientes. Su objetivo es demostrar que la tecnología que proponen funciona y llamar la atención de alguna empresa fuerte que pueda invertir en ella y ponerla en el mercado.
Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios