Francisco Guarido, alcalde de Zamora, junto a Romualdo Fernández, concejal de Urbanismo y Medio Ambiente, han presentado la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de 2011 que llevarán a cabo en el pleno de marzo, donde se suprimen 4.272.000 millones de metros cuadrados, de los que 3.066.000 corresponden a la modificación promovida por la Junta Agropecuaria y 1.206.000 a la sentencia judicial lograda por la Asociación de Regantes del Canal de San Frontis.
Guarido explicó que se pretende “volver a una situación muy parecida a la de 2011”, tachando al Partido Popular de “vivir unos delirios de grandeza con el urbanismo”. De 19.560.000 millones de metros cuadrados se pretende pasar a 15.288.000, recortando esos 4.272.000 millones de metros cuadrados y reduciendo así las cifras de población, que pasan de 167.000 a 120.000 personas, siendo estas cifras más cercanas a la realidad.
La tramitación de este plan, según el alcalde, “afecta a muchos pequeños propietarios”, pero es “racional, ajustada a lo que se quiere en Zamora y da solución a los pequeños propietarios de suelo, que piden volver a rústico”, afirma. Además de aprobarse inicialmente, se deben tener informes de las diferentes administraciones, como de la Diputación de Zamora, del Ministerio de Asuntos Económicos o de la Confederación Hidrográfica del Duero, entre otras.
La aprobación definitiva de este plan va a corresponder a la Junta de Castilla y León, cuya propuesta ya se llevaba en el programa electoral de 2019, y a finales de año puede estar tramitada, suponiendo un cambio importante a nivel urbanizable y “mejorando el desarrollo futuro de la ciudad”, concluía.
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