Aprovechando la coyuntura de la Semana Santa, si Pedro negó hasta en tres ocasiones a Cristo, la concejala de Personal ha negado a Policía Local y Bomberos en más de siete ocasiones. Laura Rivera ha negado que se haya levantado de las mesas de negociación, que se hayan suprimido derechos laborales, que no se pagan las horas extra y que no se quiere escuchar a los efectivos, entre otras.
Tras la últimas protestas, la cuales Rivera ha tildado de "desproporcionadas y de "perjudiciales" para el resto de funcionarios, en términos de los técnicos de seguridad laboral. La concejala de Personal del Ayuntamiento de Zamora, Laura Rivera, ha asegurado que las negociaciones laborales con los cuerpos de policía y bomberos siguen abiertas y se están desarrollando “con buena fe”, pese a las recientes protestas del colectivo. En declaraciones públicas, Rivera desmintió que se hayan roto los canales de diálogo y defendió que se han producido avances en varias mesas sectoriales.
“La última reunión se celebró el pasado 3 de abril y se cerró con compromisos concretos por parte de ambos lados”, apuntó. Según Rivera, las afirmaciones que niegan la existencia de negociaciones "no se corresponden con la realidad" y lamentó que "algunas declaraciones sindicales estén faltando a la verdad".
Respecto a las concentraciones realizadas por los trabajadores frente al Ayuntamiento, Rivera las consideró legítimas, pero matizó que “la movilización es desproporcionada, teniendo en cuenta que no se ha eliminado ningún derecho ni se han deteriorado sus condiciones laborales”. Según explicó, "se está trabajando para mejorar las condiciones, no para recortar".
"Esa reunión de la que hablan, yo me levanté porque llevaba varias veces avisando de que ya era la hora. En muchas ocasiones han sido ellos quienes se han levantado", aseguró manifestando "que a veces se dan voces, pero nunca ha habido nada denunciable, es cuestión de estilo, no de principios"
“Llevamos tiempo en negociaciones con los bomberos y con la policía. El planteamiento de partida fue que querían más dinero. Ese es el punto de partida. Pero aquí no se está discutiendo ni una rebaja en sus condiciones laborales ni en sus salarios”, ha afirmado Rivera. “Y lo hemos dicho una y otra vez: lo que queremos es igualdad y equidad con el resto de trabajadores del Ayuntamiento, ni más ni menos.”
En este sentido, ha señalado que se han conseguido avances significativos, por ejemplo, en el permiso de conciliación, un asunto clave: “Hay un compromiso por parte del área de Personal de que la conciliación la hagan como los demás funcionarios. Ahora mismo, el criterio jurídico de este Ayuntamiento, servicios jurídicos y técnicos, es que les corresponde una hora por jornada laboral. Ellos hacen jornadas de 24 horas o de 14 y media. Estamos intentando recoger un acuerdo que les reconozca una hora por cada siete horas y media de trabajo, como a los demás funcionarios. Se está avanzando también en eso.”
Además, ha asegurado que, pese a las críticas, el Ayuntamiento no ha roto las negociaciones y sigue trabajando activamente para mejorar las condiciones laborales dentro de los márgenes legales y presupuestarios. “No es un diálogo de sordos. Ha habido avances o principios de acuerdo. Y lo que hay que tener claro es que el Ayuntamiento no es una empresa. No estamos aquí para ganar dinero. Lo que damos a los empleados públicos no lo pierde un empresario: lo pierde o lo gana la ciudad.”
Asimismo, ha negado que las reuniones se hayan acabado porque ella se haya levantado tal y como han informado los efectivos. "Esa reunión de la que hablan, yo me levanté porque llevaba varias veces avisando de que ya era la hora. En muchas ocasiones han sido ellos quienes se han levantado", aseguró manifestando "que a veces se dna voces, pero nunca ha habido nada denunciable, es cuestión de estilo, no de principios".
Otro de los temas que ha generado polémica es el cuadrante de turnos de la policía. Rivera ha aclarado responsabilidades: “El cuadrante no corresponde al servicio de Personal, sino al servicio de Policía. A Personal le corresponde fijar los turnos de trabajo: tres turnos, como tenían desde 2010, o dos turnos, como se acordó provisionalmente tras la pandemia, a petición de la mayoría de policías. Y eso se propuso al Pleno, pese a los informes desfavorables de los técnicos por motivos de salud y seguridad.”
“Esa propuesta fue rechazada abrumadoramente en la Mesa General. Se pidió que quedara sobre la mesa, y así fue, porque no teníamos mayoría suficiente para sacarla adelante. Desde entonces, nadie ha hecho una propuesta alternativa, ni los partidos ni los representantes de Policía. Pero nosotros seguimos dispuestos a negociar, y a proponer medidas que garanticen los derechos, incluso en fines de semana y festivos, y que haya más efectivos cuando se necesitan.”
Rivera también ha destacado otros avances como el reconocimiento del derecho a conciliación familiar, en igualdad con el resto de empleados públicos (una hora por cada 7,5 horas trabajadas); el estudio de la compensación de jornadas en vacaciones y fiestas, para garantizar igualdad; y el compromiso de establecer la segunda actividad para mayores de 55 años en bomberos, similar a la existente para policías.
Sobre la valoración de peligrosidad y nocturnidad, ha indicado que ya está incluida en el complemento específico, con cuantías superiores a las del resto de funcionarios de su grupo: “216 euros más en el caso de bomberos y 369 euros más en el caso de policías. Es lógico: no es lo mismo estar en una oficina que salir a la calle a proteger o salvar vidas.”
Rivera también abordó una de las principales quejas del colectivo: las horas extraordinarias. Recordó que, según los acuerdos en vigor desde 2017, la realización de servicios extraordinarios es inicialmente voluntaria, pero puede llegar a ser obligatoria “si no se cubren los eventos con el personal disponible”, conforme a la normativa de Castilla y León.
Asimismo, negó que se esté vulnerando el derecho a la conciliación de la vida familiar. “Se ha propuesto incluir los eventos previsibles en los cuadrantes anuales para facilitar la planificación personal”, indicó, y añadió que el diseño de los turnos y la distribución del trabajo dependen de las jefaturas de cada servicio, no de la Concejalía de Personal.
Rivera expuso datos sobre la jornada de trabajo de ambos cuerpos para contextualizar las quejas: los bomberos trabajan 63 días completos al año (con jornadas de 24 horas), mientras que los policías lo hacen entre 105 y 115 días, según turnos. “Cumplen las horas que les corresponden, pero su calendario les permite muchos días de descanso. Si les parece insuficiente, se puede hablar”, afirmó.
La concejala destacó que uno de los compromisos del equipo de gobierno es la actualización de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) para todos los empleados municipales, lo cual “no implica necesariamente subir sueldos, sino valorar objetivamente cada puesto”. Además, se estudia una propuesta de carrera profesional similar a la de la Junta de Castilla y León, que también podría incluir especificidades para policías y bomberos.
Rivera pidió a los manifestantes que respeten el entorno de trabajo y a los ciudadanos que acuden al Ayuntamiento, asegurando que el Servicio de Salud Laboral ha recomendado reducir el ruido de las movilizaciones. Además, reiteró que las decisiones presupuestarias deben ceñirse a los informes técnicos y a la normativa legal vigente, incluyendo los límites salariales del sector público.
“No se trata de quién hace más ruido ni de quién presiona más”, zanjó Rivera. “El Ayuntamiento está comprometido con la mejora de las condiciones de todos sus trabajadores, pero dentro de la legalidad y con criterios de igualdad”.
Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios