Verónica Casado, consejera de Sanidad de la Junta de Castilla y León, informó el pasado sábado que en la Universidad de Salamanca se estaba desarrollando un kit propio para poder llevar a cabo pruebas de detección de coronavirus. De esta forma, según la propia Casado, Castilla y León no dependería tanto de la industria farmacéutica y podría funcionar de una forma independiente.
Pues bien, según ha confirmado el propio presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, a través de sus redes sociales, el Instituto de Salud Carlos III ya ha autorizado a los laboratorios de la universidad para hacer esas pruebas de detección del COVID-19, “continuamos trabajando para ser más ágiles y eficaces”, ha afirmado.
De esta forma, la USAL, podrá poner en marcha su kit propio, así como seguir procesando las pruebas de detección que se le están enviando.