Nós Terra Maire demanda el cumplimiento de la protección lingüística de la lengua leonesa

La asociación lamenta en una carta abierta que tanto el gobierno estatal como el autonómico “se salten” la prosa estatutaria autonómica, la de la Constitución, y la Carta de las lenguas minoritarias de la Unión Europea.

Nós Terra Maire demanda el cumplimiento de la protección lingüística de la lengua leonesa
Nós Terra Maire demanda el cumplimiento de la protección lingüística de la lengua leonesa

Este domingo 21 de febrero, se conmemora el Día de la Lengua Materna y desde la asociación Nós Terra Maire apoyan el cumplimiento con la protección y difusión del patrimonio lingüístico. Es por ello que demandan la protección de la lengua leonesa mediante el siguiente comunicado:

Zamora, León y Salamanca, La Región Leonesa, llevan siendo un territorio trilingüe durante siglos, y aunque el número de hablantes de cada una de las lenguas (la leonesa, la gallega y la castellana) que conforman su inconmensurable patrimonio lingüístico varía con cada una de ellas, ello no debería significar, ni justificar la existencia de algún tipo de jerarquización o preeminencia de unas lenguas respecto a las otras. Sin embargo, la realidad nos demuestra que no es así.

Tanto la lengua gallega, como la castellana, gozan del amparo y la protección de las administraciones e instituciones del estado, pero si hablamos de la leonesa nos encontramos que tanto la comunidad autónoma birregional de Castilla y de León, como el Gobierno de España continúan dejándola desamparada y fuera de cualquier tipo de protección, difusión y enseñanza, encontrándose ésta cada vez más arrinconada, amenazada y cercana a la desaparición. Pareciera que  nuestros representantes e instituciones quisieran seguir siendo copartícipes y contribuyendo al hecho estadístico de que a nivel mundial cada dos semanas una lengua del planeta desaparezca, avocando con ello también a la muerte a todo el patrimonio cultural e intelectual que va ligado a ella.

Todas las lenguas son vehículos indispensables con los que se transmiten y preservan los conocimientos y las culturas que poseen todas las sociedades, y por tanto ninguna de ellas puede permitirse perder dicho patrimonio tal y como desde hace décadas vienen subrayando y pidiendo organizaciones internacionales como la ONU, o la UNESCO, a las que también pertenece España, y por tanto, con dentro de las cuales suscribe sus resoluciones para acto seguido  incumplirlas de manera sistemática en el plano lingüístico.

El leonés no es un invento reciente sino que se originó tras la transformación que el latín sufrió en el actual territorio de las provincias de Zamora, León y Asturias,  cuando éste estaba ocupado por el pueblo prerromano de los ástures, siendo el primer documento escrito que de él conservamos la denominada NODICIA DE KESOS, datada en el siglo X y aparecida en el antiguo monasterio de San Justo y San Pastor en el pueblo leonés de La Rozuela.
 
A medida que el Reino de León se fue expandiendo y consolidando, también lo fue haciendo su lengua, encontrándonos que a partir del siglo XII el leonés será el idioma "oficial" empleado en los documentos legales y privados, atestiguándolo fueros como el de Zamora, Ledesma, o Salamanca entre muchos otros. Un siglo más tarde comenzarán los primeros ejemplos literarios leoneses con obras como "La Disputa de Elena y Marina" o el famoso "Libro de Alexandre".

Tras estos siglos de apogeo en el que el leonés fue apartando al latín en prestigio e importancia, llegados al siglo XIV la que comenzará a ser desplazada y arrinconada por la lengua castellana será la leonesa, que sufrirá un paulatino proceso de retroceso y desaparición ciñéndose su existencia casi exclusivamente a determinados ámbitos de su geografía frecuentemente ligados a una difícil y apartada orografía.

Dicha marginación provocó la pérdida de esta lengua como vehicular en buena parte del territorio, y también ocasionó que allí donde se conservó, y aún se conserva, se haya sufrido una fragmentación dialectal, a la par que una evolución dispar y diferente al dejar de ser la lengua oficial y de correlación entre las diferentes comarcas de las tres provincias de la Región Leonesa, así como de otras partes de la Corona Leonesa como fueron en su momento Asturias, Extremadura o la Tierra de Miranda de Douro portuguesa, emplazamiento este último donde no sólo es la lengua oficial de dicha demarcación, sino que su innegable importancia la ha constituido también como oficial para el estado luso.

Esta lengua tiene por tanto muchos nombres, tantos como variantes dialectales (sanabrés, cabreirés, alistano, berciano, mirandés, babiano, arribeño, sayagués...) pero todas ellas son hijas del mismo tronco común, por lo que aunque difieran formalmente en determinados vocablos, según el ámbito donde nos encontremos, sus diferentes hablantes son capaces de entenderse y comunicarse entre ellos empleándola.

Dicho patrimonio no debiera ser exclusivo de la triprovincial Región Leonesa, de la Asturiana, la Mirandesa, o de la Extremeña, ya que en realidad lo es de todos los ciudadanos españoles, por lo que debe ser protegida y promovida tanto por el Gobierno de España, como por las diferentes administraciones autonómicas a las que les es de afección, erradicando de una vez por todas el empleo político del hecho lingüístico, pues no existen diferentes grados, baremos o importancia entre las diferentes lenguas del estado español, siendo todas ellas fundamentales para explicarnos lo que fuimos y somos, y sería injustificable que siguiéramos por los mismos derroteros que hasta ahora y que de aquí a unos años estemos lamentándonos por haber permanecido impasibles ante la extinción de una parte de nosotros mismos y nuestra cultura como es la lengua leonesa.

Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios

Lo más leído