La estabilidad propia del verano sigue instalada en la provincia. Para este viernes se espera una jornada de intenso calor con máximas que alcanzarán hasta los 32 grados.
Un panorama meteorológico propia de la época estival a la espera de un fin de semana de cambios. De cara al sábado y al domingo se espera un descenso de las temperaturas.
Las máximas no superarán los 30 grados y marcarán el inicio de una nueva semana que podría llegar acompañada de lluvias.
Por el momento para este viernes se esperan máximas de 32 y mínimas de quince a primeras horas de la mañana.
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