La capilla del Hospital Provincial ya es historia. Ayer, comenzaron los trabajos para eliminar cualquier resto del edificio religioso y, en unos días, no habrá ni escombros de una construcción cuyo derribo se ha llevado a cabo con una gran cantidad de voces en contra. Diversos partidos políticos y agrupaciones de distinta índole habían solicitado, durante las últimas semanas, el 'indulto' para lo que consideraban un ejemplo genuino de la arquitectura de los años 60 en Zamora, pero sus reclamos no han sido atendidos.
Las movilizaciones comenzaron a principios de abril, cuando un particular abrió una recogida virtual de firmas, que sumó más de mil adeptos, en la que pedía la paralización del proyecto de obra del Hospital con el fin de evitar la demolición de la capilla. Enseguida, Izquierda Unida le dio su apoyo a esta iniciativa y recordó las recomendaciones que ya se habían realizado en su día para reforzar la protección del edificio y que este pasara a ser un bien protegido.
Aparte de Guarido y su grupo político, Adeiza también quiso mostrarse partidario del mantenimiento de la capilla. Su líder, Miguel Ángel Mateos, instó al Ayuntamiento a provocar la "rectificación" de la Junta. Lo hizo apenas unas horas después de la visita del consejero de Sanidad a Zamora. Sáez Aguado dejó patente, ya aquel 7 de abril, su intención de hacer caso omiso a las protestas en presencia de la alcaldesa de la ciudad, Rosa Valdeón.
Con esta situación aparentemente enquistada, la entonces candidata a la Alcaldía del Partido Popular, Clara San Damián, abrió una puerta al diálogo desde su partido al afirmar que se debía "reflexionar" acerca de qué hacer con la construcción religiosa. Esta afirmación no sirvió para que su formación apoyase, en el último pleno ordinario de la corporación municipal saliente, una moción en la que Izquierda Unida proponía instar a la Junta a ‘salvar’ el edificio religioso de los años 60. La abstención de los 14 concejales del PP bloqueó la última vía institucional hasta el final del mandato.
Para entonces, el propio Colegio de Arquitectos de Zamora había apoyado la propuesta de modificar el proyecto para salvar la capilla y la Asociación de Vecinos de Los Bloques había comenzado a preparar distintas movilizaciones. La más importante se celebró el pasado 16 de mayo, ya en plena campaña, y contó con la presencia de representantes de IU, Adeiza, PSOE, Podemos o Ahora Decide, aunque tuvo una escasa participación popular.
Tras aquella concentración, Guarido aseguró que en las siguientes habría más gente apoyando la lucha. No tendrá la oportunidad de comprobarlo. La ausencia de protección del edificio ha terminado por hacer inútiles los esfuerzos de los distintos colectivos y la capilla ha quedado reducida a escombros al igual que las protestas han caído en saco roto.
Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios