Virus de Epstein-Barr, el responsable
El virus de Epstein-Barr (VEB), un virus de la familia de los herpes, es el responsable de la mononucleosis infecciosa. Como sucede con otros virus de esa misma familia, el VEB queda latente en el organismo, con lo que puede reactivarse, sobre todo en personas inmunodeprimidas o simplemente cuando “bajan nuestras defensas”.
Una enfermedad muy común
Más del 95% de la población adulta presenta anticuerpos frente al VEB, la gran mayoría sin haber sido conscientes de haber pasado enfermedad alguna. Esto es así porque muchas personas lo adquieren durante la infancia, en un periodo en el que la infección suele pasar desapercibida.
La mononucleosis se manifiesta de forma más clara en adolescentes y adultos jóvenes, y aun así la sintomatología suele ser bastante inespecífica y anodina: malestar, cansancio, falta de apetito...
Síntomas de la mononucleosis
Cuando se presentan, los síntomas más característicos de la mononucleosis infecciosa son:
- Cansancio.
- Fiebre.
- Dolor de garganta (a veces con inflamación de amígdalas y dificultad para tragar).
- Inflamación de ganglios linfáticos (más típicamente los del cuello, pero también los de axilas e ingles).
No tienen por qué ocurrir todos, ni al mismo tiempo, ni con la misma intensidad, pero pueden llegar a ser acusados.
En bastantes casos se produce también un aumento de tamaño del bazo (de hecho, una complicación que puede producirse es la rotura del bazo).
Si el médico sospecha de una mononucleosis, un análisis de sangre aclarará las cosas.
La duración de la enfermedad, cuando se manifiesta en su plenitud, es muy variable. En la mayoría de los casos la fase aguda se supera en dos o tres semanas, tras las cuales puede retomarse la vida normal, aunque la sensación de cansancio puede persistir varias semanas más.
¿Cómo se transmite?
La saliva es la principal fuente de contagio (de ahí que sea conocida como "enfermedad del beso"). Puede transmitirse por los besos (sobre todo si se acompañan intercambio de saliva), pero también al compartir vasos, cubiertos… o simplemente por las de las partículas que un portador del virus lanza al aire al estornudar, toser o hablar.
También se contagiapor las tetinas de biberón o los chupetes, en los niños pequeños. Otras posibles vías de transmisión son a través de la sangre y el semen.
¿Podemos evitar el contagio?
Casi todos los adultos son portadores del VEB y cualquier portador sano puede transmitir el virus a alguien que no haya tenido todavía contacto con él, por lo que no hay medidas eficaces que impidan la difusión del virus en la población.
El período de incubación de la enfermedad (período que va desde el contacto con el virus hasta la aparición de los primeros síntomas) puede oscilar entre diez días y seis semanas, lo que también dificulta adoptar medidas preventivas durante la fase aguda. No obstante, quienesmás fácilmente transmiten el virus son las personas que están en plena infección o que acaban de pasarla, puesto que su saliva contiene una carga más alta de virus.
Hay que tener cuidado con las mujeres embarazadas que no tengan anticuerpos de VEB: en ese caso, si saben de alguien que tenga o que acabe de pasar la mononucleosis, es mejor evitar el contacto, dado que el contagio durante el embarazo sí puede resultar peligroso para el feto.
Tratamiento de la mononucleosis
No existe tratamiento específico para la mononucleosis infecciosa, aunque sí pueden aliviarse sus síntomas. El tratamiento típico de esta infección pasa por:
- Hacer reposo durante la fase aguda.
- Para la fiebre y el dolor, puede tomarse un analgésico antipirético, como el paracetamol.
- En caso de fiebre prolongada debe beberse abundante agua y líquidos para evitar la deshidratación.
- Para el dolor de garganta alivia tomar bebidas calientes o muy frías. O hacer gárgaras con agua caliente salada (una cucharilla de sal por taza de agua caliente).
- En los que casos en que se detecta agrandamiento del bazo, deberían evitarse esfuerzos físicos violentos o deportes de contacto hasta que la persona se recupere, para minimizar el riesgo de su rotura.
Como en otras infecciones virales, en la mononucleosis infecciosa no tiene sentido tomar antibióticos: no solo son ineficaces contra los virus, sino que en el caso de mononucleosis pueden ser hasta contraproducentes: pueden provocar erupción cutánea y picores, lo que erróneamente podría hacer pensar en una reacción alérgica.
¿Puede la enfermedad del beso causar la esclerosis?
Los medios han recogido la noticia de que “por fin” se había descubierto la causa de la esclerosis múltiple, que no era otra que el virus de Epstein-Barr (VEB), causante de la mononucleosis infecciosa, la famosa “enfermedad del beso”. Como hemos visto, la mononucleosis es una infección muy común, y de hecho casi toda la población ha desarrollado anticuerpos frente al VEB, por lo que muchas personas se han alarmado. Ante esto, la Sociedad Española de Neurología se vio forzada a emitir un comunicado para informar y tranquilizar a la población: no hay una relación causa/efecto demostrada, pero el virus sí puede ser un factor desencadenante del desarrollo de la enfermedad (uno más), en personas genéticamente predispuestas.
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