Tercera Edad en Acción ha hecho públicas sus diversas peticiones para el casco antiguo de la ciudad de Zamora. Desde la formación política hacen énfasis en la presencia de los "numerosos solares abandonados, algunos con tapias que amenazan venirse abajo sobre los viandantes", poniendo de ejemplo el de la rúa de los Notarios, el cual desde su derribo "no se ha cuidado". Un solar del que, recuerdan, el propio Francisco Guarido aseguró que iba "a exigir" a los propietarios su limpieza, algo que no ha sucedido. Situación contra las que exigen la actuación del servicio de Urbanismo, tanto por la imagen para los turistas como por "la seguridad de peatones".
Por otro lado, el partido hace hincapié en la incomodidad de los cantos y piedras del firme en la zona del casco antiguo, ejemplificando la problemática con la plaza de Viriato, donde se puede generar algún "esguince" en caso de dar un mal paso. También apuntan a la plaza de San Martín, donde "solo se utiliza el parque infantil porque el resto es un auténtico secarral". "Se cargaron el templete, que daba encanto al espacio de recreo, y se han vuelto a “plantar” cantos y piedras que ni tan si quiera quedan bonitos", pidiendo una "reforma definitiva" de la zona.
Respecto a los jardines del parque del Castillo, Tercera Edad en Acción los califica como "minimalistas, con una sobriedad que duele", evidenciando la ausencia de fuentes en los jardines "que deberían ser los más hermosos y admirados de Zamora", un entorno en el cual consideran que la fortaleza "necesita otro repaso que la convierta en un monumento digno de visitar". También encuentran espacio en sus reivindicaciones para la torre de la Catedral, recordando que "existe un proyecto arquitectónico" para que sea abierta al pública.
Una serie de mejoras que aseguran que deberían abordarse a través de "un segundo Plan del Casco Antiguo" para mejorar el realizado por Antonio Vázquez en su momento.
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