Mario Chimeno, zamorano del 81. Periodista de formación y publicista de vocación. Su máxima: ‘Solo hay una manera de hacer las cosas: hacerlas bien’. Vinculado siempre al deporte, este 'perseguidor de sueños' cofundó a principios de año Titanes, una plataforma sin ánimo de lucro “para ayudar, respaldar, asesorar, promocionar, organizar y participar en retos deportivos que supongan gestas para el ser humano”.
Tras completar la maratón de Berlín en 2015, este año el zamorano decidió acompañar a su amigo Sergio Monge en la Mongolia Bike Challenge, una de las cinco pruebas de BTT más exigentes en la actualidad. El recorrido: casi 700 kilómetros en seis etapas por la estepa de un país "absolutamente inhóspito", en palabras de Chimeno. El objetivo: dar a conocer la rara enfermedad de Dent, de origen genético ligada al cromosoma X que afecta exclusivamente al riñón, produciendo perdidas de sustancias como proteínas, calcio, fósforo o glucosa y sufrida por Nacho, un niño barcelonés de 8 años.
Su madre, Eva, con esclerosis múltiple en el 53% de su cuerpo, aseguró que sería capaz de ir hasta China por ayudar a su hijo. Pero no hizo falta. No. “No hace falta que vayas a la China, que ya vamos nosotros a Mongolia”, le respondieron Mario y Sergio.
Así comenzó el reto de estos dos titanes que finalizó la pasada semana coincidiendo con el treinta y cinco cumpleaños de Chimeno. El zamorano sostiene que los retos deportivos son un medio de expresión del afán de superación y competitividad de nuestras vidas. Además, añade que “al compartir el reto, haces partícipe a mucha más gente y te obligas a darles una respuesta por lo que la satisfacción personal de cumplir ese objetivo es aun mayor”.
Su compañero Sergio pedaleó todas las etapas con un muñeco ‘mini Nacho’ a sus espaldas y él se encargó de todo el trabajo de comunicación: desde la labor de diseño y fotografía hasta la cobertura gráfica y difusión en distintos medios y redes sociales. Tras haber superado la prueba, la organización de la Mongolia Bike Challenge decidió hacer entrega del maillot rosa a Sergio Monge en reconocimiento de su causa solidaria. Su aventura está teniendo gran repercusión cumpliendo así su objetivo de visibilizar la enfermedad y ambos 'titanes' ya piensan en el siguiente reto.
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