Imagínense que están en Japón y deben pedir una manzana a un oriundo. Obviamente si no conocen el idioma les resultará tremendamente complicado. Esto mismo es lo que deben afrontar diariamente las personas que padecen autismo o, al menos, la mayoría, ya que el Trastorno del Espectro del Autismo es diferente según la persona que lo padezca.
Sin embargo, derribar esta barrera es en lo que se centra el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo. No en vano, el lema es ‘Rompamos juntos barreras por el autismo. Hagamos una sociedad accesible’, referido al desarrollo efectivo de medidas para la eliminación de las muchas barreras que todavía impiden que las personas con Trastornos del Espectro del Autismo (TEA) puedan disfrutar plenamente de sus derechos.
Y es que las personas con autismo tienen dificultades en su parte social. Su cerebro procesa la información de manera diferente y les cuesta comunicarse, mantener contacto visual y relaciones. Por ello, se hace tan esencial el conseguir una forma diferente de conseguir llegar a ellas. El más utilizado es el lenguaje a través de pictogramas, que se ha incorporado ya en diversos edificios.
El diagnóstico y la atención temprana
Como en todos los casos, siempre es preferible detectar el posible autismo en edades muy tempranas. Actualmente, existe el llamado cuestionario M-CHAT, un test fiable que se realiza a los padres para descubrir algún rasgo que pueda indicar autismo. Obviamente, cuanto antes se pueda ver, antes se comenzará a tratar por lo que el aprendizaje también será más rápido.
Y es que esta es la manera de conseguir que las personas con TEA se integren en una sociedad que también debe aceptar y fijarse en sus capacidades, que son muchas, y no en las limitaciones. En la Asociación Ariadna todo se realiza a través de profesionales específicos, lo que implica que la mejoría en las relaciones de los niños y niñas con autismo. Además, comprenden que se les debe retar a hacer algo que para ellos sea difícil pero siempre conociendo que después tendrán una recompensa. Toda la relación se basa en la confianza.
La atención también se debe dar a las familias, ya que la formación de cómo se debe tratar a un niño con autismo es esencial para poder hacer la vida para todos más fácil. Además, también se debe saber que con el autismo se nace y no se desarrolla durante el crecimiento, a pesar de que se pueda diagnosticar muchos años después. Por ello, la importancia de saber si se padece el trastorno para poder actuar.
De esta manera, hay un decálogo de actuaciones que los niños y niñas con autismo pueden desarrollar. Entre estas se encuentra el no hacer caso a otras personas o no jugar con los demás niños y niñas hasta el punto de que se les debe insistir para que participen con el resto.
También puede que hablen incesantemente sobre el mismo tema y que repitan lo que han oído repetitivamente. Sus juegos son diferentes a los del resto y se ríen o ponen contentos sin motivo aparente. Sin embargo, no les gustan los cambios y su comportamiento puede llegar a ser extraño y repetir algún gesto continuamente o balancearse, aletear sus manos, etc.
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