La consejera de Sanidad, Verónica Casado, se mostró hoy convencida de poder a vacunar antes de febrero a los más de 138.000 niños de la Comunidad de entre 5 y 11 años con la primera dosis de la vacuna contra el COVID, a la vez que se mostró partidaria de continuar administrando la tercera dosis por grupos de edad, una vez que finalice en los mayores de sesenta años y que los niños reciban la primera.
Casado, en la rueda de prensa ofrecida este mediodía para ofrecer los datos del observatorio de agresiones a profesionales sanitarios de Castilla y León, explicó que además de las 54.000 dosis infantiles recibidas ya, el Ministerio de Sanidad ha confirmado la llegada de otra remesa de 30.000 para el próximo 3 de enero.
En este sentido, la consejera explicó que en el reparto de las primeras 54.000 dosis no se han podido tener en cuenta criterios poblacionales y se ha dividido en lotes de 6.000 por provincia, dado que las vacunas se presentan en bandejas que no se pueden fragmentar.
A su vez, la directora general de Salud Pública, Carmen Pacheco, indicó que la vacunación infantil se iniciará por los mayores, el grupo de 10 y 11 años, dado que son los que más riesgo tienen de sufrir complicaciones en el caso de contagio. También explicó que las dosis infantiles contienen solo un tercio del principio activo que se inyecta a la población adulta, y que el intervalo con la segunda dosis debe ser de ocho semanas.
Ademas, también informó que sólo en el caso de que el menor no acuda acompañado por alguno de sus progenitores o por su representante legal, será necesario una autorización, e indicó que en el caso de varios hermanos en edad de vacuna, la cita asignada debe ser la del hermano de menor edad.
Gripe
Por otra parte, Pacheco negó que exista un desabastecimiento de vacunas contra la gripe, aunque no descartó que se pueden producir casos puntuales, y explicó que este año, aunque se han adquirido más dosis, la campaña ha sido más complicada al hacerla coincidir con la de COVID en las personas de mayor edad.