Medio siglo después de la encamisada de los tercios españoles a los holandeses en la isla de Bommel, se vuelve a repetir la historia. La primera parte de la recreación de El Milagro de Empel, ha hecho testigo al Duero del asalto nocturno de los españoles a la isla de Bommel. Y recibe tal nombre debido a que los españoles irrumpían en territorio enemigo de noche, de sorpresa, ataviados con la camisa interna del uniforme cubriendo la totalidad de su uniforme bélico.
Así ha transcurrido la primera parte de la recreación, en la que se ha mostrado la primera parte de la contienda conocida como El Milagro de Empel. El primer movimiento de los tercios españoles antes de que los enemigos abriesen los diques y todo pareciese perdido para las tropas hispanas. Un desenlace para el que habrá que esperar hasta el sábado.
Esta primera parte, ha sido presenciada por cientos de zamoranos que no han querido perderse la oportunidad de vivir en primera persona uno de los capítulos de la historia española. El realismo de la artillería y la tensión entre ambos bandos, han dejado en la Playa de los Pelambres una contienda difícil de olvidar.Las vestimentas de los participantes en la recreación, así como su fiel interpretación, han metido de lleno a los espectadores en la historia. El Casco Antiguo de Zamora, con la Catedral al fondo, ha dibujado un escenario inigualable en el que casi pareciese que la capital había viajado en el tiempo hasta el Empel de 1585.
Tienes que iniciar sesión para ver los comentarios