Cáritas Diocesana de Zamora se ha convertido en un indicador “revelador” de la realidad social que vive España y proporciona durante los últimos años uno de los datos objetivos para analizar la situación en la que se encuentra cada provincia.
Por lo que se refiere a Zamora, durante el ejercicio de 2012 Cáritas atendió a un total de 23.217 personas, lo que supuso un aumento del siete por ciento respecto al año 2011, cuando fueron 21.704 las personas que requirieron ayuda, según las cifras que arrojó la Memoria de Actividades de 2012, presentada el pasado mes de junio.
El número de familias que precisan la ayuda de la organización católica se incrementó en “todos los centros y programas”, con especial incidencia en el de Empleo, que rondó las 500 personas y con la excepción del programa de Inmigrantes, que pasó de 136 a 119 usuarios, “en parte también por la crisis económica y la reducción de prestaciones sociales”.
Especialmente llamativo resultó el apartado de los alquileres, a los que un millar de familias zamoranas no pueden hacer frente porque “si pagan el alquiler, no comen y, si comen, no pagan el alquiler”, según indicó la directora de Cáritas Diocesana de Zamora, Mercedes Morán.
Las cifras resultaron positivas desde el punto de vista del voluntariado, que se pretende potenciar en 2014 todavía más. En 2011, 843 personas colaboraron desinteresadamente y en 2012, fueron 856, con un aumento destacado en los centros de apoyo al menor.
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