El Ministerio de Trabajo ha renovado los nombramientos de 1.500 efectivos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), pero solo durante tres meses más, hasta el próximo 30 de junio. La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), sindicato más representativo en las administraciones públicas, critica que la medida es un parche temporal y no resuelve la necesidad de reforzar el empleo de manera urgente.
En concreto, se trata de los 1.500 funcionarios interinos nombrados como consecuencia del Covid19, contratados hasta el 31 de marzo. Además, queda pendiente la renovación del personal adscrito a otro Programa (635 efectivos) y cuyos nombramientos finalizarán también el 30 de junio.
Desde el sindicato critican que con esta decisión el Ministerio se limita a huir hacia adelante, sin aportar ninguna solución de futuro al problema, ya que desconocemos que pasará con ambos colectivos de funcionarios interinos a partir de final de junio. Exigen que se aclare cuanto antes si estos 2.135 trabajadores/as continuarán en el organismo a partir de esa fecha, y durante cuánto tiempo más.
Tras la denuncia de CSIF el pasado enero, el Ministerio de Trabajo anunció la renovación de estos trabajadores interinos y desde el sindicato volvieron a dirigir un escrito a la Dirección General de la Función Pública manifestando nuestra profunda preocupación porque no ven garantías para su continuidad en el SEPE, una vez se agote la vigencia del programa para el que fueron nombrados.
El sindicato viene alertando desde el inicio de la pandemia de que la situación del SEPE es tremendamente compleja y delicada, ya que los trabajadores deben abordar unas cargas de trabajo imposibles de asumir y gestionar, dada la alarmante carencia de recursos humanos.
Por eso, siguen reclamando al Ministerio de Trabajo la convocatoria de una oferta de empleo pública, extraordinaria y específica para paliar el déficit estructural del SEPE, ya que en los últimos diez años se han perdido cerca de 3.400 efectivos por las políticas de recortes. Urge una dotación suficiente de recursos humanos, estructurales y profesionalizados, ante la situación de emergencia social por el Covid y las previsiones económicas y del mercado laboral.
En la actualidad, este organismo cuenta con unos 8.400 efectivos de los que un 33% son trabajadores temporales y tiene, además, en torno a 1.500 puestos vacantes. "Una cifra totalmente insuficiente para atender a la ciudadanía", aseguran.
El sindicato lleva meses advirtiendo sobre la avalancha de expedientes en estas oficinas, sin que se pongan en marcha las medidas que demandamos porque miles de personas afectadas siguen pendientes de regularizar sus prestaciones, muchos de ellos en una situación de una gran vulnerabilidad.
Entre otras propuestas, CSIF exige también la ampliación de la jornada de tarde para el conjunto de la plantilla de este organismo, de manera universal y voluntaria. "Las horas extras autorizadas para el SEPE no son suficientes para afrontar la actual carga de trabajo, circunstancias que se podría paliar habilitando la jornada de tarde, tal y como se contempla en las Entidades Gestoras de la Seguridad Social", finalizan.
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