UGT ha pedido que se controlen los contratos que se crean durante la nueva normalidad para evitar que las empresas utilicen el subempleo durante la recuperación, según ha señalado en un comunicado.
El sindicato ha alertado de que la salida de la crisis se está cimentando sobre contratos temporales y de mala calidad. El sindicato apunta que el número total de contratos registrados descendió un 21,2% en marzo respecto a febrero, un porcentaje que se acentuó en abril, con una caída del 46,4%. Desde su punto de vista, estas cifras reflejan la finalización de los contratos temporales y los empleos perdidos por despidos, individuales y colectivos.
En mayo, apunta que se observa un posible cambio de la contratación, con una recuperación del 26,4% de la contratación respecto a abril, apoyada sobre un crecimiento superior de los contratos a tiempo parcial, tanto indefinidos como temporales.
"Parece que nuestro país sigue sin aprender la lección y la salida de la crisis se está realizando nuevamente en base a contratos temporales y de mala calidad, como ya sucedió en la crisis de 2008", ha apuntado el sindicato que.
Desde su punto de vista, el comportamiento de los contratos a jornada parcial debería ser foco de atención en el proceso de desescalada y de nueva normalidad, "con el fin de evitar que se conviertan en un mecanismo de creación de subempleo que utilicen las empresas en el periodo de recuperación de la crisis por coronavirus, como sucedió en la crisis previa, con consecuencias tan devastadoras sobre la precarización del mercado de trabajo español".
"No podemos fundamental el funcionamiento de nuestro mercado laboral sobre unas bases tan frágiles", ha puesto de relieve, tras apuntar que es el momento de derogar la reforma laboral y crear un nuevo Estatuto de los Trabajadores más moderno, más eficaz y adaptado a las nuevas realidades productivas.
El sindicato considera que crisis como ésta han puesto de manifiesto la debilidad del modelo productivo español y que es necesario cambiarlo para asentar una "reconstrucción sólida, eficiente y sin dejar a nadie atrás".
Por otro lado, ha puesto en valor la importancia de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE), que cree que están funcionando como "un verdadero escudo de protección ante el despido, facilitando la flexibilidad interna frente a la destrucción de empleo".
El sindicato considera que la trayectoria seguida por el registro del desempleo permite vislumbrar un freno en mayo que "podría anticipar un menor impacto en términos de empleo que en crisis anteriores, tanto en lo referente a la duración del periodo de destrucción de empleo (que sería de menor amplitud que en la crisis de 2008-2009) como en volumen de personas desempleadas, considerando los máximos de paro alcanzados durante la recaída sufrida en el empleo por la recesión de 2012-2013".
No obstante, piensa que todo dependerá de la ausencia de rebrotes de la pandemia y de lo que suceda con las personas afectadas por ERTE. Es por ello que el sindicato ha reclamado que se mantenga su situación durante el tiempo necesario y que, cuando la actividad se recupere, se puedan reincorporar plenamente a su puesto de trabajo. "Hay que asegurar el empleo para poder reconstruir, económica y socialmente, nuestro país", ha apostillado.
Por esto, ve fundamental que se mantengan los estímulos fiscales y monetarios con toda intensidad, ya que "sin ellos la salida no será posible". "Debemos ser conscientes de que el esfuerzo será enorme y que ello aumentará el déficit y la deuda de manera muy importante y que esto será así en la mayoría de los países de la Unión Europea, aunque no en todos con la misma intensidad", ha añadido.
"En todo caso, ahora no es el momento ni de acometer medidas de recorte, que serían letales, ni siquiera de plantearlas, porque la incertidumbre es enorme y todas las energías deben focalizarse de manera solidaria en impulsar la actividad y el empleo", según el sindicato, que cree que introducir en estos momentos mensajes sobre la necesidad futura de acometer recortes o reformas estructurales (fórmula que suele usarse como eufemismo para aludir también a los recortes) solo sirve para "generar confusión y alentar planteamientos improcedentes".
Por último, el sindicato cree que el Informe Anual del Banco de España tiene "buena música, pero mala letra" y cree que se apresura a prescribir "la necesidad de establecer a una estrategia de ajuste fiscal para el futuro próximo, como si eso fuera posible". De este modo, según el sindicato, se alientan las pulsiones recortadoras y contractivas de muchos empresarios e instituciones, "que mientras con una mano reclaman cuantiosas ayudas para sus sectores o actividades, no dudan en exigir con la otra mano ajustes de gasto social para los más desfavorecidos, o nuevos recortes de derechos laborales".
UGT insta a controlar los contratos para evitar que las empresas utilicen el subempleo en la recuperación
Cree que el Informe Anual del Banco de España tiene "buena música, pero mala letra".
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