La argamasa que une las piedras ha desaparecido prácticamente, por lo que parte de las piedras están prácticamente sin sujeción. Una simple comprobación visual, así lo demuestra. La naturaleza del material con que está construido no permite en las circunstancias señaladas, que  siga en pie durante mucho tiempo. Por lo que la situación actual, es de peligro inminente, según apuntan los militantes de UPL.

El muro, considerado por algunos parte de la muralla, sirve de contención de tierras sobre las que se asienta el firme de la calle. Su derrumbe podría traer graves  consecuencias. Tanto, perjuicios materiales, como daños físicos para las personas a las que pudiera afectar, por encontrarse en la zona en el momento de desplomarse. “Riesgos innecesarios y evitables  de afrontarse una solución de inmediato”, comentan desde Unión del Pueblo Leonés.

UPL pide al Ayuntamiento que se asegure en primera instancia la pared, “mediante andamiaje apropiado para, seguidamente, emprender la tarea de una consolidación con suficiente garantías”, y que en caso de no hacerlo “cuentas consecuencias pudiera acarrear el desplome del muro tendrán que achacarse al propio Consistorio”.

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