El Ramos Carrión, escenario casi improvisado para acoger algunos de los principales eventos de esta XIX Edición del Festival Internacional de Folklore de Zamora, acogía durante la tarde de este domingo la gala de clausura, para poner punto final a una exitosa edición marcada por la multiculturalidad y el arraigo de las tradiciones en lo que a música y danza se refieren. Con grupos internacionales, procedentes de Serbia, Tailandia o Israel, y nacionales de Galicia o Mallorca, el Festival de Folklore de Zamora cerraba sus puertas una edición más con una última exhibición de color, danza y música de muy diversas formas y estilos, haciendo las delicias de un público que correspondió a la organización y agotó las entradas en apenas veinte minutos.
Con un patio de butacas lleno hasta la bandera, los movimientos acompasados al ritmo de tan diferentes músicas y las coloridas danzas de los distintos grupos folklóricos que desfilaron sobre el escenario del teatro zamorano, el público no pudo sino dejarse las manos aplaudiendo cada una de las actuaciones, para dejar claro lo que se pretende poner de manifiesto con este festival: que la cultura tradicional no entiende de edades ni de fronteras y que, lejos de ser algo caduco y perdido en los insondables caminos del tiempo, es algo que permanece muy vivo y así seguirá mientras haya gente que luche por mantenerla con vida.
GALERÍA | La gala de clausura del XIX Festival Internacional de Folklore de Zamora
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