La incidencia de COVID-19 a 14 días en mayores de 60 años en Castilla y León subió hasta los 122,06 casos por cada 100.000 habitantes entre los mayores de 60 años, aunque permanece en nivel circulación controlada. A siete días se encuentra en 66,75. Así figura en la estadística comunicada por la Consejería de Sanidad recogida por Ical, que sostiene que ambos indicadores se encuentran aún en los ratios de circulación controlada, también en el conjunto de las nueve provincias de la Comunidad, a excepción de Zamora, donde la tasa a siete días se sitúa en 186,2 casos y a 14 días, en 301,9, ambas en riesgo bajo, además de Segovia a siete días (145,9).
En paralelo, las unidades de cuidados intensivos de los hospitales de Castilla y León se mantienen en circulación controlada, con el 1,45 por ciento de ocupación. Solo hay pacientes por coronavirus en estas unidades en León (4,4 por ciento), Burgos (2,13) y Valladolid (0,93 por ciento). El resto no contabilizan pacientes por COVID.
También sube la tasa de ocupación de camas de hospitalización por casos de COVID-19 en Castilla y León, hasta el 5,9 por ciento, el doble que hace tres días, con lo que este parámetro se consolida en nivel bajo. Ávila, con un 10,75 por ciento, encabeza este porcentaje, seguida de Zamora (10,1), ambas en nivel medio. Por su parte, en circulación controlada se encuentran Valladolid (7,5 por ciento), Burgos (6,7), Segovia (5,8), León (4,2 por ciento), Soria (3,4), Palencia (2,5) y Salamanca (2,4 por ciento).
En cuanto al número reproductivo básico se mantiene en 0,98. El dato más elevado está en Segovia, con 1,41. Superan también la barrera del 1 las provincias de Burgos (1,34), Ávila (1,25), Soria (1,24), Palencia (1,14) y Zamora (1,04). Por debajo, Valladolid (0,87), Salamanca (0,85) y León (0,78).
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