Zamora sigue viviendo una pesadilla con el fuego: segundo gran incendio en los dos primeros meses de 2022

El año 2022 no ha arrancado en Zamora de la mejor manera en cuanto a incendios se refiere. Las llamas han causado estragos en la comarca de Alta Sanabria entre enero y febrero con dos grandes focos que llegaron a colocar el nivel 1 de alerta por parte de la Junta de Castilla y León.

El primero se producía el pasado 28 de enero en la localidad de Hermisende, teniendo el importante hándicap del paso de la frontera con Portugal y dejar dos frentes abiertos entre los que tuvieron que repartirse los medios de extinción en busca de frenar su avance. La importancia del mismo quedó patente con imágenes satélite que mostraban las consecuencias de unas llamas que provocaron una columna de humo que recorrió más de 240 kilómetros y se dejaba ver en la ría de Vigo.

Los medios aéreos y terrestres combatieron el foco, el cual se tradujo también en el corte de la carretera ZA-L-2698 ante la cercanía de las llamas con la calzada, contando con el apoyo de efectivos llegados desde la propia Galicia y el país luso. Trabajo que dio sus frutos tras horas de esfuerzo y con más de 2.000 hectáreas de terreno dañadas que acabaron con un color negro que seguirá presente en dichas tierras durante los próximos años hasta recuperar su tono habitual.

Después de este gran incendio, las alarmas volvían a saltar en la Alta Sanabria durante la noche del viernes. El valle del Tuela presentaba un color rojizo y anaranjado cuando el sol ya no estaba presente, activando las alertas entre los vecinos de Las Hedradas y Chanos, los dos puntos más cercanos a unas llamas visibles desde cientos de metros de distancia.

La ausencia de medios impedía la correcta actuación durante las primeras horas. A primera hora del sábado, con el sol permitiendo una correcta visibilidad, los medios aéreos llegaban desde la base de Villardeciervos para ayudar a las dotaciones terrestres. Con el paso de los minutos el número de efectivos aumentaba y lo hacía desde diversos puntos, aumentando también el riesgo y declarando la Junta de Castilla y León, como hiciera el pasado mes de enero, el nivel 1 al superarse las 12 horas de actividad.

Finalmente, durante las primeras horas de la tarde del sábado era la propia Junta quien señalaba como controlado un foco que ha afectado a más de 500 hectáreas de terreno y que dejaba imágenes impactantes como las llamas a escasos metros de molinos eólicos de la zona. Actuación de seis medios aéreos, seis cuadrillas, tres autobombas, dos buldóceres y cinco agentes medioambientales que, gracias a su labor, declararon bajo control el segundo gran incendio que ha azotado a la provincia de Zamora en los dos primeros meses del año 2022, en plena etapa invernal.