Zamora hace sonar el timbre por la parálisis cerebral: “Queremos que todas las ciudades tengan los mismos servicios"
Una de las reivindicaciones de la asociación Sanagua Aspace Zamora es la creación de un centro de día para reforzar los servicios terapéuticos y atender a más familias
Zamora tocó el timbre con motivo del Día Mundial de la Parálisis Cerebral. Bajo el lema de este año, ‘Ya toca’, se refleja la urgencia y la importancia de visibilizar las demandas de las personas con parálisis cerebral. Una urgencia que también comparten sus familias, voluntarios y trabajadores sociales, quienes reclaman mayor apoyo institucional y impulsar una Estrategia Estatal que elimine las desigualdades entre territorios.
“Lo que queremos es que se nos vea y que se nos apoye desde el principio, y que tengamos en todas las ciudades los mismos servicios que tienen otras”, apunta Marisol Codesal, presidenta de Sanagua Aspace Zamora.
Una mesa informativa se instaló en la Plaza de la Constitución, donde los zamoranos dejaron un post-it con la reivindicación que consideraban importante para las personas con parálisis cerebral. Tras colocarlo, tocaron un timbre como símbolo de una llamada de atención a las administraciones.
“Pedimos más financiación. Hay muchísimas más familias que lo necesitan. Queremos tener servicios desde el principio y que podamos atenderlos como es debido”, explicó Susana Gutiérrez, trabajadora social de Sanagua Aspace Zamora.
Desde la asociación se reclama a las instituciones la creación de un centro de día y una residencia en la provincia. “Mucha gente nos tenemos que ir a otras ciudades a que atiendan a nuestros chicos”, sostuvo Gutiérrez, quien también subrayó la necesidad de una atención temprana y apoyo desde el nacimiento. “Necesitamos que nuestro colectivo se haya tomado más en cuenta, que nuestros usuarios tengan todas las necesidades cubiertas desde que nacen”, aseveró.
Sanagua Aspace Zamora insiste en la urgencia de construir un centro de día, aunque reconocen que la respuesta de las instituciones es que “ahora no es buen momento para construir”. Por ello, proponen como solución ampliar el espacio existente y reforzar los servicios terapéuticos. “Atendemos a 30 familias, pero porque realmente no podemos atender a más”, concluyó.
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