El Juzgado de lo Penal número 4 de Castellón ha condenado a un hombre a ocho meses de prisión por un delito de amenazas no condicionales tras colgar de un árbol un muñeco al que añadió una fotocopia con la cara del presidente de Vox, Santiago Abascal, y al que colocó varias manchas rojas en su parte delantera simulando disparos.
La sentencia contempla la circunstancia atenuante de dilaciones y la agravante de discriminación, e impone al acusado el pago de una indemnización de 500 euros a favor de la víctima por perjuicios morales.
Sin embargo, el juzgado absuelve al acusado del delito de odio del que le acusaba la acusación particular por falta de pruebas de cargo. La sentencia se puede recurrir en apelación ante la Audiencia Provincial.
La sentencia señala que queda probado que el acusado manipuló un mono de color blanco, de polipropileno, con mangas y perneras largas y gorro tipo capucha, un día no concretado de inicios de marzo de 2020, en el que introdujo bolas de papel arrugado, utilizando sobre él un spray de pintura roja, a fin de colocar seis manchas rojas en su parte delantera, simulando disparos, en las extremidades, cabeza y tronco.
Además, el procesado utilizó otros sprays de pintura, uno de color negro para escribir BAF -acrónimo de 'Brigades Antifeixistes de Castelló'- en la parte delantera de la pernera derecha, y otro verde para escribir a lo largo de la cremallera las letras Vox.
En la parte del gorro adhirió con cinta de embalar trasparente una fotocopia a color tamaño DIN A4 con la cara de Santiago Abascal, líder de Vox, a la que colocó una mancha de pintura roja a la altura de la frente.
El acusado ató una cuerda a los pies de ese muñeco, en hora no concretada, pero durante la madrugada del día 8 de marzo de 2020, y lo colgó de la rama de un árbol ubicado en la plaza María Agustina de Castelló.
Sobre las 5.30 horas de ese día, un grupo de afiliados y simpatizantes del partido Vox de la zona de Castellón se reunieron, en la citada plaza, para montar en un autobús con dirección al Palacio de Vistalegre, donde estaba previsto un acto del partido en el que intervenía, entre otros, Santiago Abascal, los cuales contemplaron el muñeco y avisaron a la Policía, por lo que acudieron unos agentes que lo descolgaron del árbol y lo trasladaron a la Comisaría Provincial de Castellón.
El muñeco fue examinado por agentes de Policía científica, que hallaron huellas del acusado en la cinta adhesiva, lo que permitió su identificación.
Según la sentencia, el acusado estuvo movido por motivos ideológicos al confeccionar el muñeco y ubicarlo en el árbol, pretendiendo atentar contra la tranquilidad de ánimo de Santiago Abascal y de las personas afiliadas y simpatizantes al partido que éste dirige, Vox. Santiago Abascal conoció la existencia del muñeco a través de las redes sociales, sufriendo el "lógico temor", por lo que reclama.
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