La mitad de los pacientes con diabetes desarrolla disfunciones sexuales en la primera década tras el diagnóstico

Hasta el 50% de las personas con diabetes sufre algún tipo de disfunción sexual durante los diez primeros años tras el diagnóstico, según ha advertido Loreto Mendoza, profesora del Departamento de Obstetricia y Ginecología de la Universidad de Granada. La cifra, además, aumenta conforme avanza la enfermedad.

Mendoza participó en una jornada divulgativa organizada en Córdoba por la Fundación de la Sociedad Española de Diabetes (FSED) y la Federación Española de Diabetes (FEDE) con motivo del Día Mundial de la Diabetes. Allí destacó que estos problemas, pese a ser frecuentes, suelen mantenerse en silencio por vergüenza o por no considerarse prioritarios en consulta.

La profesora explicó que la disfunción sexual afecta tanto a hombres como a mujeres y se manifiesta sobre todo en la fase de excitación. En ellas, señaló, el impacto suele estar más relacionado con la autoestima y la imagen corporal, lo que favorece la inseguridad y la evitación del contacto íntimo.

Durante el encuentro se subrayó también que la disfunción eréctil puede ser un marcador precoz de diabetes no diagnosticada en hombres de mediana edad, además de un indicador de aterosclerosis asintomática en pacientes con diabetes tipo 2. Por ello, Mendoza abogó por incluir su valoración en los protocolos de riesgo cardiovascular.

Los expertos recordaron que la disfunción sexual asociada a la diabetes tiene un origen multifactorial, que combina factores metabólicos, neurológicos, vasculares, hormonales y psicológicos. Un abordaje adecuado, indicaron, debe integrar dieta, medicación, ejercicio y la corrección de otros factores agravantes como depresión, hipertensión, tabaquismo o sedentarismo.

El impacto emocional, un ámbito aún pendiente

Otro de los puntos destacados fue la necesidad de contemplar la salud emocional en el manejo clínico de la diabetes. El psicólogo Francisco Javier Hurtado alertó de que la exigencia diaria de la enfermedad aumenta el riesgo de depresión, ansiedad, problemas de sueño y otros trastornos. Por ello, propuso incorporar el “TIR-Emocional”, un seguimiento del bienestar psicológico que complemente el tiempo en rango glucémico.

Obstáculos en el ámbito laboral

La jornada también abordó las dificultades que muchas personas con diabetes encuentran en el trabajo. La Federación Internacional de Diabetes (IDF) denunció que persisten situaciones de estigma, discriminación e incluso exclusión laboral. El abogado Javier Sanhonorato Vázquez, especialista en Derecho Sanitario, lamentó la ausencia de una normativa específica que proteja adecuadamente a las personas con enfermedades crónicas y reclamó actuaciones urgentes para garantizar igualdad y equidad.